Domingo 14 de octubre de 2012
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VIEJITO, queremos agradecerte con el corazón por haber hecho de nosotros tus hijos, lo que ahora somos, personas de bien. Recordamos todas las cosas que nos enseñaste y como nos enseñaste (con juegos, con enojos, con charlas, etc.) las tareas del colegio, a nadar, a bailar, a manejar bici, a manejar auto, mil cosas, más…, cómo olvidar cuando querías enseñarnos algo de tu maravillosa profesión como a cortar (algunos de nosotros con vocación y otros sin vocación); quedan recuerdos en nuestras mentes y enseñanzas inolvidables; no dudes VIEJITO siempre haremos lo que nos enseñaste y seguiremos los valores que nos inculcaste, esperando que junto a Dios puedan iluminarnos para hacerlo de la misma forma con nuestros hijos, tus nietitos.
Sabemos lo mucho que amaste a nuestra familia, no tenemos ninguna duda, pues aunque no lo decías con palabras, la manera como trabajaste, para que nunca nos falte nada y tener más de lo necesario, lo demuestra, por lo menos nunca nos negaste nada, (es que éramos los niños de tus ojos)… “Viejito querido” la verdad siempre creímos (inconscientemente) que tú y mi mamá eran como los superhéroes “inmortales”, que nada podía pasarles, que nada haría que se alejen de nosotros… la realidad nos demostró lo contrario; fue muy fuerte el golpe para descubrir que al igual que nosotros, ustedes son humanos, pero a pesar de todo no podemos resignarnos …pasan los días y tu ausencia en nuestras vidas es más notoria, te extrañamos muchísimo…, el vacío que dejaste en nosotros nada lo puede llenar, hoy y siempre nos harás falta.
Fuente: LA PATRIA