Existe una “reducción generalizada de confianza en las instituciones del Estado”, incluidas la representación electoral y la justicia, que ha revertido la “tendencia sostenida de crecimiento que tenía lugar desde el 2006”, según una investigación realizada por la Comunidad de Estudios Sociales y Acción Pública (Lapop).
El estudio está contenido en el libro “Cultura Política de la Democracia en Bolivia, 2012: Hacia la igualdad de oportunidades”, que aborda, entre otros temas, el apoyo a la democracia por parte de la ciudadanía boliviana, la percepción de legitimidad de las instituciones políticas, el desgaste histórico y debilidad creciente de la justicia boliviana, la corrupción, la delincuencia y la identidad étnica en Bolivia.
El documento, elaborado por la Comunidad de Estudios Sociales y Acción Pública (Lapop), fue presentado en coordinación con la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Unidad Académica Regional La Paz de la Universidad Católica Boliviana (UCB).
De acuerdo con la investigación, los bolivianos son mayoritariamente “estatistas”, ya que “reclaman una intervención vigorosa del Estado en la economía y la sociedad”, en tanto que “la tolerancia y el pluralismo son valores todavía poco arraigados”.
“Una de las certezas irrebatibles de la democracia en Bolivia desde su restauración fue la participación ciudadana en los procesos electorales”, es una de las primeras conclusiones del documento. Sin embargo, advierte, que en los últimos años hubo una creciente disminución del apoyo a la democracia, debido principalmente, “al proceso de cambio vinculado al desplazamiento de los focos conflictivos de la reforma institucional a las políticas públicas”.
Los resultados de la investigación muestran que “hubo una reducción generalizada de confianza en las instituciones del Estado”, revirtiendo así “una tendencia sostenida de crecimiento que tenía lugar desde el 2006”.
La confianza en las instituciones de representación electoral y en la Policía también ha disminuido. “Estos datos son preocupantes”, se argumenta, “porque las instituciones de representación son la única manera que el ciudadano tiene para acceder al Estado”.
Sin embargo, la aprobación del desempeño del Presidente Evo Morales todavía tiene una influencia incuestionable sobre las opiniones de los ciudadanos en relación al aparato estatal.
Al igual que la confianza en la democracia y legitimidad de las instituciones públicas, el sistema de justicia boliviano y el conjunto de instituciones responsables de administrarla muestran un “estado de debilidad creciente y un desgaste histórico”, que tiene “consecuencias para la sociedad y la democracia boliviana”.
“Una de las consecuencias importantes de estas condiciones del sistema de justicia es una pérdida de confianza generalizada para todas las instituciones tradicionales del sistema judicial”, los resultados de la investigación muestran que la justicia comunitaria es la única que cuenta con la confianza de la población boliviana.
La corrupción y la delincuencia también han cambiado en la percepción de la gente. “Los bolivianos parecen haber desarrollado tolerancia a la corrupción”, se concluye en el libro. En cambio, la delincuencia ha sido reconocida como “el principal problema del país”.
No todos los datos son negativos. Según el estudio, Bolivia es una de las sociedades más participativas de América Latina. Los bolivianos que asisten a votar en las elecciones, el número de personas que salen a protestar en las calles y la participación cívica comunitaria confirman “la existencia de una fuerte cultura política participativa en la población boliviana”.
Fuente: La Paz, 13 (ANF).-
Para tus amigos:
¡Oferta!
Solicita tu membresía Premium y disfruta estos beneficios adicionales:
- Edición diaria disponible desde las 5:00 am.
- Periódico del día en PDF descargable.
- Fotografías en alta resolución.
- Acceso a ediciones pasadas digitales desde 2010.