Cuando surgen entredichos especialmente con el tema de la reivindicación marítima que mantiene vigente el Gobierno de Bolivia, situación que causa “escozor” a las autoridades chilenas, surge como alternativa muy clara la oferta peruana de habilitar el Puerto de Ilo en el sur peruano para facilitarnos una salida al océano Pacífico, situación que sin embargo necesita de la ratificación del Protocolo pertinente por parte del Congreso peruano.
Son varias las muestras solidarias de gobiernos peruanos en torno a la demanda boliviana para recuperar las costas invadidas por la fuerza chilena y en esa corriente de amistad especial que no gusta a Chile, uno de los últimos mandatarios del Perú, caso de Alan García, reiteró la oferta de dotar a Bolivia de un puerto aledaño al que tiene el Perú en Ilo, cesión que abarcará en el tiempo casi un siglo (99 años) y que permitiría con la debida infraestructura movilizar a Bolivia toda la carga que produce en exportaciones e importaciones, además de establecer en el mismo sitio el funcionamiento de una unidad militar de la marina nacional.
De acuerdo a los datos que se manejan entre los trámites sobre las gestiones ya avanzadas para ocupar los terrenos cedidos en el anterior gobierno peruano y cuyo acuerdo se firmó en octubre del 2010 entre los mandatarios de ambos países, tuvo la ratificatoria protocolar del Congreso Boliviano en febrero del 2011, esperándose entonces similar tratamiento por parte de los legisladores del vecino país, aspecto que se demoró por el cambio de gobierno, pues asumió Ollanta Humala que si bien ratificó el acuerdo, el mismo todavía no ha sido ratificado en la instancia del Congreso peruano.
Por lo que se sabe algunos celosos parlamentarios peruanos arguyeron alguna parte de la redacción del documento que sería muy sensible a la soberanía del vecino país, por tanto y mientras se enmiende tal observación el acceso cedido a Bolivia en Ilo aún no puede ser operable. La observación según se dejó traslucir tendría que ver con el asentamiento en ese puerto de una unidad de la Armada Boliviana.
Puede haber “resquemores”, como califican algunos parlamentarios bolivianos a la posición de sus colegas peruanos, empero existe también la esperanza de que en breve tiempo ese protocolo sea aprobado y la concesión peruana solidaria a Bolivia de un acceso por Ilo al océano Pacífico sería una realidad que permitirá encarar algún plan de contingencia para hacer uso de ese enclave en las playas peruanas, desviando la carga que actualmente se queda varada en el puerto chileno de Arica.
Como se observa muchas ofertas no pueden hacerse realidad sólo por el entusiasmo de mandatarios, hay reglas que deben cumplirse y en ese plano lo que debería hacerse a través de nuestra cancillería es recordar al Gobierno chileno que el tan mentado Tratado de 1904 está siendo incumplido por Chile que obstaculiza las operaciones portuarias bolivianas en Arica.
El Congreso del Perú considerará la aprobación del Protocolo de Ilo, y ese será realmente un desafío a nuestro gobierno para encarar el funcionamiento de un puerto bajo nuestra directa administración, lógicamente implementándolo como corresponde y se supone adoptando las previsiones del caso, especialmente en lo que significa su financiamiento.
Fuente: LA PATRIA
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