Jueves 06 de septiembre de 2012
ver hoy
Si los católicos o los protestantes no quieren o no se les permite creer en la reencarnación, necesariamente tendrán que creer en el infierno. Pues según las enseñanzas católica y protestante, un alma muy pecadora está eternamente condenada.
Sin embargo por la misericordia de Dios esto no es así, Dios no condenaría a ninguno de Sus hijos eternamente, ni siquiera nos condena. El nos ama, por eso algún día también el alma cargada de pecados puede volver a encarnarse y eliminar paso a paso su culpa para volverse de nuevo completamente libre. Todos podemos regresar a Dios, al Hogar del Padre. Ése es el sentido de nuestra vida terrenal.
Cada cual puede creer lo que quiera, sin embargo habría que aclarar que Jesús no quería ni Iglesias ni sacerdotes, tampoco enseñó ninguna condenación eterna. Jesús enseñó que el templo de Dios está en nuestro interior y en esta conciencia las personas podemos reconocer que Dios está siempre presente, no importa cuántas encarnaciones vivamos.
(*) Vida Universal
info@universelles-leben.org
www.vida-universal.org