Alegría y llanto sepultan los delitos de 428 reos bolivianos indultados en Chile

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El emotivo recibimiento que dieron algunos familiares de personas privadas de libertad en Chile, ayer cerca al mediodía, en la frontera que une Bolivia con ese país, dejó en el olvido, el delito de 428 reclusos indultados en el país mapocho.

La llegada de los 14 buses que transportaron a 428 personas entre mujeres y varones de nacionalidad boliviana que fueron aprehendidos por transportar sustancias controladas, al vecino país de Chile, se realizó ayer por la mañana y parte de la tarde, en la frontera boliviana-chilena, que une la localidad de Pisiga, ubicada a 235 kilómetros aproximadamente de la ciudad y de Colchane, jurisdicción chilena.

Enterados de la noticia, los familiares de los exreclusos se constituyeron en dicho puesto fronterizo, especialmente de los que son oriundos de Oruro, quienes con el rostro enjuagado en lágrimas abrazaron a sus parientes que después de tres o cuatro años, nuevamente están en territorio boliviano.

Pasada la revisión, los ciudadanos indultados volvieron al motorizado, pero en el trajín, no aguantaron abrazar y besar al hijo, el hermano, la esposa o la madre que los esperaban.

El viceministro boliviano de Régimen Interior, Jorge Pérez, que estuvo presente en el acto calificado como “histórico”, señaló que el perdón o indulto emitido a ciudadanos bolivianos, privados de libertad, fue un acto solidario y humanitario del gobierno chileno.

“Son hermanos y hermanas nuestras que por ´x o z` motivo lesionaron la normativa chilena y se encontraban privados de libertad lejos de su país, ahora gracias a este indulto tienen una segunda oportunidad de vida”, expresó.

VOLUNTARIO

El ministro de Justicia de Chile, Teodoro Ribera sostuvo que las 428 personas bolivianas, optaron voluntariamente por volver al país con el compromiso de no retornar a Chile durante los próximos diez años.

“Este es el operativo de traslado de condenados al extranjero más grande que tuvo lugar en la historia de Chile y se desarrolló con gran respeto de la perspectiva de seguridad y los derechos humanos, nos preocupamos que las personas primero lleguen en buses de calidad, además fueron acompañadas con cuatro ambulancias, teléfonos satelitales, médicos, etc”, sostuvo Ribera.

En el viaje, solo tres personas sufrieron efectos en su salud, dos funcionarios policiales de Chile y una exinterna.

“Ellos en Chile, cumplieron una pena, una sanción, estuvieron privados de libertad y saben que si vuelven a Chile en los próximos diez años, tendrán que cumplir lo que les falta en la pena que se les dio en su oportunidad”, añadió.

Según Ribera, en Chile existen aproximadamente 800 personas de 28 diferentes nacionalidades, que también correrán con la misma suerte, es decir, serán devueltos a sus países de origen.

LEY

Mediante la ley de indulto conmutativo Nº 20588, aprobada por el gobierno chileno, más de 500 personas de nacionalidad boliviana que fueron encontradas en posesión de sustancias controladas y tenían una sentencia que cumplir en el país vecino, se acogieron a dicha normativa y ahora gozan de libertad en diferentes departamentos de Bolivia, con la condición de no retornar más a la República vecina.

También hay siete personas, con antecedentes o tienen cuentas pendientes con la justicia boliviana, por lo que fueron aprehendidas, una vez que pisaron territorio boliviano.

Para el viceministro Pérez, la decisión política asumida por chilenos, con intención humanitaria, ahora empezó a crear una “especie de temblor” en los países sudamericanos.

“En nuestro país existe una comisión que está analizando la posibilidad de implementarla, viendo cuales serían los instrumentos legales adecuados a efectos de poder seguir por esta ruta, porque para nadie es desconocido que en América del Sur es un problema bastante profundo el hacinamiento en centros penitenciarios, en Bolivia tenemos muchos extranjeros que está cumpliendo penas”, añadió.

Fuente: Pisiga-LA PATRIA