Loading...
Invitado


Domingo 19 de agosto de 2012

Portada Principal
Cultural El Duende

Breve historia de la escritura

19 ago 2012

Fuente: LA PATRIA

El escritor investigador, miembro de la Academia de Ciencias Jurídicas, Vicente González Aramayo Zuleta (Oruro, 1932) aborda en este estudio la evolución de la escritura y su importancia en la historia humana

¿Fotos en alta resolución?, cámbiate a Premium...

Segunda y última parte

La escritura cuneiforme está representada por figuras generalmente parecidas a animales pequeños como peces, objetos de diversas formas, estrellas, conos y otras. Ahora bien, ¿cómo escribían? Eso vamos a ver. Como ejemplo, anotaré textualmente lo que describe el Libro Life-Time:

“Imaginemos en el año 1700 antes de nuestra era. Nos encontramos en una anónima ciudad situada a orillas del río Éufrates, en el sur de Mesopotamia, región que actualmente forma parte de Irak. En la plaza del mercado está sentado un escriba. En una mano tiene una tableta de arcilla húmeda, y en la otra un estilete puntiagudo hecho cortando una caña. A su lado se halla un comerciante llamado Nanni que envía una carta a Ea-Nasir, socio suyo en la lejana ciudad de Ur. Nanni, sentado de cuclillas y balanceándose hacia adelante y hacia atrás dicta al escriba sus quejas contra sus socios por un asunto de unos lingotes de cobre defectuosos.

No has cumplido lo que me prometiste, se lamenta. Le entregaste unos lingotes defectuosos a mi empleado y le dijiste: “¡Si los quieres, tómalos, si no, lárgate!”. Nanni espera a que el escriba grave en la arcilla los pequeños grupos de signos en forma de cuña que registran su queja y luego continúa: ¿Por quién me tomas para tratar así a una persona de mi rango? He enviado como mensajeros a personas tan importantes como nosotros mismos para que reclamasen mi dinero, pero tú me has menospreciado despachándolos con las manos vacías.

Nanni continúa en ese tono mientras el escriba anota sus airadas palabras. Por fin concluye: Ten en cuenta que, a partir de ahora, ya no aceptaré cobre tuyo que no sea de buena calidad. En adelante yo mismo inspeccionaré los lingotes uno por uno y ejerceré mi derecho a rechazarlos, porque tú me has menospreciado.

El escriba, una vez terminada la carta se la entrega al comerciante que, en las horas en que su almacén está abierto, se pase por allí cuando quiera para percibir sus honorarios: una medida de cebada. Nanni se dirige luego a su oficina, donde deposita la carta sobre un anaquel para que se seque. Mañana se la confiará que navegará por el río hasta Ur, a unos 300 kilómetros del Golfo Pérsico, en una semana o dos, la carta llegará a su destinatario y éste finalmente pagará la suma demandada, o la contestará en el mismo tono indignado, o tal vez no se dé por enterado, como ya había hecho en otras ocasiones.

En cuanto a la carta, probablemente es colocada en los archivos comerciales, más tarde la arrojarán a una escombrera donde quedará enterrada bajo los desechos que se acumularán a lo largo de los siglos.(8)

Como podrá apreciarse, el comercio en aquellos tiempos tenía los mismos parámetros de siempre, y fue así a través de los tiempos. La tablilla de arcilla con la carta aún legible, ha sido encontrada en Ur, durante las excavaciones de principios del siglo XX. Estaba escrita en Cuneiforme, es decir en forma de cuñas, (palabra latina), y sostiene la misma fuente que esta escritura desciende del sistema de escritura pictográfica, probablemente de origen sumerio y del año 3100 antes de la era cristiana, y ha llegado en nuestro siglo pasado a poder del profesor asiriólogo de la Universidad de Chicago, quien comprendió el contenido de la misma.(9)

Como refiere la misma fuente, la escritura de Nanni, ha perdurado por tanto tiempo y este valioso documento arqueológico, resulta punto de partida del desarrollo de la cultura humana, una verdadera revolución, como la agricultura y el descubrimiento de fuego. Todo ello, pero sobre todo la escritura, ha permitido la relación de los hombres y los pueblos del mundo.

Los antiguos chinos consideraron a la escritura como signos que les permitían comunicarse con sus ancestros y divinidades. Los filósofos han definido también la escritura en varias épocas. Aristóteles dice que la escritura constituye símbolo de las palabras habladas, y el teórico de la Revolución Francesa, Voltaire, afirmó: La escritura es la pintura de la voz. Los lingüistas modernos califican la escritura como un sistema de comunicación humana por medio de signos establecidos convencionalmente y que representan un lenguaje.”(10)

Como ya hemos visto, la escritura hasta llegar a Nanni, por ejemplo, ha tenido un largo proceso de perfeccionamiento. El hombre primero tuvo que descubrir que tenía voz, que podía hablar, pero cuando hablaba con algunos de su grupo, tenía necesariamente que hacer señas, mostrar figuras que se forman en las nubes, en los cerros, en las plantas, en el agua; el mismo sol y la luna debieron ser el principio de una letra futura; las manos también debieron jugar un rol en las expresiones del qué trasmitir y qué recibir, o cuando ya hablaron, pudieron hacerse entender con rasgos más propios y luego dibujos, como hemos de ver luego con los aztecas de América.

Todos los pueblos del mundo desarrollaron el lenguaje, la escritura y el idioma. La estructura gramatical es semejante, aunque no igual en todos, solo difieren los caracteres. Como ejemplo, adoptaron la escritura latina muchos países como Italia, España, Rumania, Portugal, Francia, Inglaterra, Alemania… en suma, la escritura que podemos leer aun cuando no entendamos qué dice. Estos países escriben con caracteres latinos porque emergieron del dominio de Roma. Sin embargo, los países asiáticos, africanos y americanos tienen diferentes caracteres, aun entre ellos.

Se dice que los incas no tuvieron escritura, sin embargo desarrollaron gran cultura en arte, ciencia, derecho, matemáticas, geometría, economía, ingeniería y arquitectura. Los europeos de todas las épocas han observado y estudiado los quipus. Se ha establecido que tenían una forma de aritmética para mantener su contabilidad en sus productos agropecuarios. Nudos seguidos en los hilos sin cantidades con números, los intervalos son los ceros. No obstante, existe otra forma de quipus, de nudos poco más grandes y más gruesos, alternativamente medios y pequeños. De colores variados. Se supone que éstos pueden ser una forma de escritura.

Con absoluta seguridad, los aztecas tenían escritura y la practicaban los dibujantes. Es de este modo cómo Moctezuma se enteró del desembarco de los españoles en Tabasco. A través de los dibujos del mensajero vio hombres barbudos con y animales extraños. Los mayas tuvieron escritura de tipo jeroglífico y la plasmaron en hojas de árboles. Los curas españoles, suponiendo que los mayas eran sub-humanos y no podrían haber conocido la escritura, creyendo más bien que fuera obra del demonio, quemaron sus invenciones. Sólo se salvó una obra para la posteridad: el Popol Vuh.

El libro. La cristalización de la escritura es el libro. Es la espada del pensamiento. En el Libro el hombre ha depositado su cosecha cultural de todos los tiempos. A través de él se ha producido el desarrollo humano. Todos los pueblos han escrito, primordialmente sus leyes, sus códigos. Más tarde su historia y ulteriormente las formas literarias. Hay libros antiguos que cantan y rezan las costumbres y necesidades de sus pueblos. Así, el Hammurabi de Babilonia, el Libro de los Muertos de Egipto. En España, en La biblioteca del Monasterio de El Escorial, pude ver en l981 el Códice de Oro, escrito con 8 kilos de pan de oro, Misal de Isabel la Católica, hasta con sus huellas del mucho manejo por la reina; ediciones antiguas sobre obras de Homero, Virgilio, Dante, Plutarco, Julio César, Solivio e historiadores y jurisconsultos romanos, Don Quijote, La Araucana de Ercilla, en fin… pare de contar; solo esa biblioteca sería comprable a un bosque tupido e impenetrable. (Cuando visité por segunda vez el Escorial, la biblioteca ya no estaba a disposición del público, la habían archivado).

Hasta la invención de la imprenta de tipos movibles por Gutenberg, en Maguncia en el año de 1436, sólo los adinerados podían tener una biblioteca de 20 libros. Todos, voluminosos, escritos a mano sobre pergamino, luego sobre papel cuando éste se inventó (año 100 d. C). Los libros impresos desde Gutenberg hasta el año 1500 se denominan “Incunables”, y su precio ahora varía entre 1 y 60 millones de dólares. Se ha sabido que se dan subastas con esos precios. Se sabe también que ha habido gente que ha tenido por lo menos uno de estos incunables, pero nunca lo supieron, por eso mismo los perdieron. En la biblioteca de la Universidad de Oruro había dos incunables: se perdieron en el golpe de estado de Banzer. Un amigo comentó: pero no se robaron los militares, ellos no saben de incunables…

Ahora hay miles de millones de libros y grandes bibliotecas en universidades, institutos, instituciones y en poder de particulares. Asimismo, grandes librerías como la de Foyle en Inglaterra, allí hay –dice una revista– …libros por libras y por toneladas. En su techo, durante la segunda guerra mundial colocó cientos de ejemplares de Mein Kemp de Hitler, durante los bombardeos alemanes. En Bolivia tenemos grandes literatos como Tamayo, Augusto Céspedes, René Moreno, Nataniel Aguirre, Taboada Terán, y muchos más, que la brevedad por su apego a la lectura han reivindicado la importancia del libro. Me permito recomendar la lectura de la obra Elogio del Libro de Gustavo Adolfo Otero.

Un sabio adagio dice: Los libros son instrumentos mudos que les hablan a los sordos.

Notas

8, 9 y10 - LIFE-TIME, USA.

Fin

Fuente: LA PATRIA
Para tus amigos: