Policías se repliegan y sus esposas tomaron el Comando

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Gritando al unísono “Evo cuidado febrero se repita”, los policías, algunos con el rostro cubierto, decidieron replegarse y sus esposas tomaron el Comando Departamental de Policía de Oruro, como medida de protesta para pedir atención a sus demandas sectoriales, entre ellas el pago de un salario justo.

Las esposas de suboficiales, sargentos, cabos y policías que el martes instalaron un piquete de huelga de hambre en las puertas de la Casa de Gobierno ya en el interior del patio de la Policía, aseguraron que no retrocederán en sus demandas, entre las que se encuentran la nivelación salarial para sus esposos, una jubilación justa y la abrogación de Ley 101 de Régimen Disciplinario de la Policía Boliviana.

Aproximadamente 30 mujeres movilizadas cerrando las puertas del comando policial y junto a sus esposos permanecieron en el interior, haciendo detonar petardos.

Narró que los policías se sacrifican las 24 horas y trabajan hasta 48 horas continuas. No están con su familia; solo cada dos años reciben tela para su uniforme, en cuanto al equipamiento señalaron que son los mismos policías con su “mísero” salario que debe comprar sus herramientas y armas para cumplir su labor, haciéndose cargo incluso del mantenimiento de los vehículos o las motocicletas del servicio policial.

“Cuando van a hacer servicios extraordinarios sale el dinero de su bolsillo no les reconocen, no tienen vacaciones, porque en cualquier momento les convocan. Cuando salen a trabajar nuestros esposos no sabemos si van a volver vivos. Sufren las inclemencias del tiempo, el frío, calor, lluvia, viento. Están sirviendo”, sostuvo.

SOSPECHOSO

Ayer cuando se desarrollaba la conferencia de prensa, en la que los policías exponían sus demandas, se detuvo a un sospechoso que rondaba el comando y que llevaba una gorra de militar, quien se puso nervioso y en su desesperación dijo que su abuelo era militar y que la gorra que vestía, era de su hermano. La presencia del sujeto causó la reacción de los policías y lo agredieron.

El hombre fue conducido a celdas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), y no quisieron revelar su nombre, siendo el comandante de la Policía, Wenceslao Zea O’phelan Palza quien aseguró se hará una investigación para establecer la identidad del detenido y de dónde proviene.

Tras la detención, los policías esperaron que el fiscal sea quien inicie una investigación para conocer su nombre, sin embargo, un periodistas lo reconoció indicando que días pasados ya vio al sujeto en Caracollo cuando los mineros protagonizaban un bloqueo de caminos, ocasión en la que el sujeto se hizo pasar por periodista.

COMANDANTE

Por su parte el Cnl. Zea O’phelan expresó su solidaridad con sus subalternos reconociendo que tienen necesidades que deben ser atendidas.

“Pensamos que las reivindicaciones que hacen las esposas son justas, ellas piden ser atendidas por el Gobierno en sus necesidades económicas. La ley es dura y afecta a los derechos humanos de los policías, porque por alguna indisciplina les afectan su salario, para esto se debe llevar un proceso justo donde se determine si hay o no falta”, expresó Zea O’phelan.

En cuanto a la situación precaria en la que se encuentran los ambientes en los que duermen los policías, así como los muebles que utilizan, la autoridad dijo que es deber de los comandantes velar por la infraestructura, equipamiento y alimentación.

“El Comando Departamental de Policía de Oruro no ha mejorado en muchos años, es algo que debemos ver y hacer las solicitudes correspondientes a las autoridades de la Gobernación y Alcaldía”, señaló, a tiempo de indicar que está conmovido por la situación que se presenta en los policías, porque son los que salen a las calles y se enfrentan a los riesgos.

En cuanto a la movilización en el Comando sostuvo que no es una toma porque los servicios continuarán trabajando, y que es más bien la casa de los policías, de la que no se los puede echar, ni a los policías, ni a las esposas.

Fuente: LA PATRIA