Loading...
Invitado


Sábado 16 de junio de 2012

Portada Principal
Revista Tu Espacio

EDITORIAL

16 jun 2012

Fuente: LA PATRIA

¿Fotos en alta resolución?, cámbiate a Premium...

Vaya semana que tuvimos los orureños, llena de conflictos mineros, más mineros y ediles, lo que no nos sorprende, porque desde que empezó el año, por lo menos una marcha de protesta arribó al centro de la ciudad, una vez por semana.

Lo que nos causa asombro es cómo las movilizaciones que se realizan siempre llegan a la Plaza 10 de Febrero y esta se convierte en el escenario central de la protesta, aspecto que no es del agrado de los habitantes de esta urbe, porque no solo causan malestar, sino que ya aburren y lo que es peor se debe soportar la intolerancia, la malacrianza y las ganas que tienen los manifestantes de destrozar y ensuciar el centro histórico de Oruro.

Aspecto que se vio en días recientes cuando un grupo de mineros se apoderó de la Plaza 10 de Febrero y haciendo abuso de su presencia, hicieron detonar dinamita a diestra y siniestra atentado contra la integridad de las personas, contaminando el medio ambiente.

Nadie está en contra de las demandas que plantean, pero en lo que no vamos a estar de acuerdo es en la forma en que protestan, causando caos en la ciudad y no solo es de este sector, sino también de los universitarios, campesinos, vecinos, transportistas y otros.

Ahora todos los sectores usan dinamita como un artefacto de protesta, pero en ningún momento, se preguntaron o pensaron que están destrozando la ciudad. Da pena pasar por la Plaza 10 de Febrero, lugar histórico para los orureños porque es ahí donde se fundó la ciudad. La Plaza tiene huecos por todos lados que ya parece un cernidor la capa asfáltica y no solo eso, sino que se raja de todos lados ante la vista y paciencia de nuestras autoridades, que deberían establecer una normativa para prohibir el uso de explosivos en el centro de la ciudad.

Lamentablemente, solo pensamos en nuestros intereses y no en el convivir de la población, que lo único que quiere es paz y trabajar para sacar adelante este terruño de la fosa en que se encuentra.

Como jóvenes reiteramos que no tenemos nada en contra de ningún sector, simplemente les pedimos que cuiden y quieran a su región. La Plaza es la cara de la ciudad y lamentablemente ese rostro está mugre, magullado y olvidado a su suerte.

Si tenemos que protestar hagámoslo, pero busquemos formas originales de hacerlo, solo es cuestión de pensar y no de destruir lo poco que tenemos, que no fue fácil construirlo. Reflexionemos y cambiemos nuestro modo de ver las movilizaciones.

Dehymar Antezana - Editor Tu espacio

Fuente: LA PATRIA
Para tus amigos: