Tolerancia y sentido común

Llegó la época de vacaciones, luego de un intenso año escolar y para disfrutar del momento, muchas familias optan por viajar para olvidarse de la rutina, conocer nuevos lugares y vivir experiencias inolvidables.

En ocasiones no siempre viajan todos los miembros de una familia, porque el papá o la mamá trabajan o ambos y los niños, adolescentes deben ir con los abuelos generalmente o un pariente muy cercano y de mucha confianza, ya que ningún progenitor confiará a sus retoños a desconocidos.

Desde hace unos años, la Dirección de Igualdad de Oportunidades, decidió poner en marcha una campaña de protección a las personas de corta edad, para evitar la trata de personas, raptos, fugas u otro tipo de delitos, situación que es destacable por el trabajo de prevención, cuyos resultados fueron positivos.

Sin embargo, hay fallas y observaciones en la forma del control que se lo hace, rescatando el criterio de algunos padres de familia.

Entre los documentos solicitados están por ejemplo, la cédula de identidad vigente, certificado de nacimiento original; dos testigos, un familiar y uno conocido. Si los hijos viajan solo con el papá o la mamá, se debe presentar la autorización del ausente; si la mamá es divorciada, al margen de los requisitos mencionados se debe tener a la mano, la sentencia de divorcio; pero si es soltera, dos testigos, como ya lo mencionamos.

Como se observa, son muchos los requisitos que se piden y en más de una oportunidad, los viajeros tuvieron que quedarse en el lugar, perdiendo el bus que los llevaría a otro destino, por falta de algún documento solicitado.

Asimismo, en una oportunidad, una funcionaria de la DIO bajó del bus y de manera prepotente, a una madre de familia que estaba con sus dos hijos, sin considerar la hora de su llegada a otra ciudad o si tendrían los recursos para quedarse unas horas más en una urbe que no era la suya.

Si se usaría el sentido común, los funcionarios de la DIO, obrarían en función a la situación, además de intensificar una campaña agresiva mediática, no solo por los medios tradicionales sino también por las redes sociales y quizá disminuir en algo el trámite burocrático que se debe hacer para evitar tantos dolores de cabeza y en algunos casos hasta perjuicios. No solo se evitarán delitos, sino que se mejorará el control de los niños y jóvenes antes del viaje.