Feliz aniversario Oruro

La ciudad de Oruro fue fundada el 1 de noviembre de 1606, pasó de ser una villa minera a ciudad cosmopolita y luego a centro estratégico del comercio, en la actualidad es casi una ciudad de paso y pocas son las autoridades que se preocupan por su crecimiento y desarrollo.

Desde hace años se sigue anhelando el funcionamiento al cien por ciento del Puerto Seco, contar con un mercado central limpio y ordenado como el de Tarija, que la estación ferroviaria se traslade y no divida la urbe en dos, además que funcione un tren bala, en lugar del qué existe ahora.

Entre otras preocupaciones se puede citar al deterioro de su patrimonio natural y ni qué decir de sus edificios patrimoniales, que en la actualidad casi no existen, su centro histórico se convierte más en un mercadillo y está abarrotado de vehículos motorizados de servicio público, que avanzan como si tuvieran todo el día para hacerlo.

Hay mucho por hacer por esta bella ciudad para mejorarla, pero no se puede ser indiferente ante lo bueno que se hizo, y hay que reconocer que los jardines de las plazas principales fueron adornados bellamente con flores y estructuras que imitan a algunos insectos y animales.

También se puede resaltar la presencia del mayor monumento religioso de Latinoamérica, construido en el cerro Santa Bárbara, que da la bienvenida a los visitantes desde que están en las carreteras.

Entre las cosas buenas que tiene la ciudad, se puede destacar el teleférico turístico, el complejo cultural y otras obras, como parques Infantiles y plazas, que han mandado a hacer las autoridades del municipio, en diferentes gestiones.

Sin embargo, aún hay mucho por hacer para que ésta sea realmente una ciudad capital, además de recuperar el estatus de ciudad cosmopolita, la más limpia de Bolivia, capital del folklore boliviano.

Ojalá que las autoridades ediles se ocupen de darle a Oruro lo que merece, dobles vías de acceso a la ciudad, que estén limpias y presentables, que su aeropuerto internacional realmente funcione, que pueda contar con un mercado central, moderno, limpio y ordenado.

También se necesita que los edificios patrimoniales sean restaurados y preservados, ya que constituye la memoria visual del pasado glorioso de Oruro.

Se debe preservar y cuidar todo lo que se ha realizado hasta la actualidad, mejorar lo que ya hay, y por qué no hacer cosas nuevas que le beneficien a la ciudad y a sus habitantes, y todos los ciudadanos debemos contribuir de alguna manera, haciendo nuestro mejor esfuerzo por lo menos de mantener la ciudad limpia.

Con los mejores deseos de prosperidad, bienestar y desarrollo, felicitamos desde esta columna a todos los orureños, feliz aniversario y ¡que viva a Oruro!