Para reciclar hay que saber hacerlo

En la actualidad vivimos una crisis ecológica porque no sabemos reciclar, de hecho, en Bolivia no se practican las 3R, reducir, reutilizar y reciclar, aunque se ha comenzado a impulsar esas acciones para darle un respiro, a nuestro medio ambiente, de basuras contaminantes.

Recientemente se hizo pública una noticia acerca de la "madera plástica", aunque su puesta en el mercado internacional data de bastante tiempo atrás, lo que lleva a la reflexión acerca de la práctica del reciclaje.

Comencemos por hacer un llamado a la universidad, pública o privada, su obligación debiera ser la investigación científica acerca de lo que se puede hacer con el plástico de un solo uso para evitar que contamine el ambiente, en otros países se fabrican ladrillos, maderas y hasta pavimento, que son sólidos, livianos y resistentes.

En realidad, estos nuevos materiales a partir del plástico reciclado, se presentan como una solución a la contaminación, y se presentan como una alternativa verde para evitar que la basura prolifere, generando un gran daño ambiental.

En Colombia y en Costa Rica existen fábricas de "madera" plástica, donde le dan otra oportunidad a este material, ofreciendo su materia prima para elaborar muebles, juguetes y hasta casas, con lo que lograron reducir la contaminación por plástico en el municipio donde está instalada la factoría del milagroso material.

No obstante, no cualquier plástico sirve para procesar y convertir en un nuevo material y menos un nuevo producto, porque, en Reino Unido, donde la cultura del reciclaje está más avanzada, enfrentan dificultades por no saber reciclar de la manera correcta.

Un ejemplo de ello es que los envases plásticos deben ser lavados antes de ponerlos en contenedores específicos para ese material, no se debe mezclar con otros materiales, sirven las botellas PET pero sus etiquetas comprometen su pureza.

Algunos de los recicladores, que importan el plástico para transformarlo, no aceptan otro material que no sean botellas, bolsas y otros no les sirven, entonces se acumulan por toneladas y luego de un mes de almacenaje ese material sólo servirá para el vertedero.

Las botellas plásticas que se sacaron del lago Uru Uru estaban bastante contaminadas y sucias, por lo que no se sabe si realmente serán útiles y demandadas por los compradores, para su reciclaje y transformación.

En la experiencia del Reino Unido cada estado o nación debe hacerse cargo de sus desechos, y procesarlos en su mismo suelo, ya que China era uno de los compradores, pero ante la llegada excesiva de material inservible decidieron detener su importación y la prohibieron en su totalidad, por lo que, si se quiere hacer algo con el plástico que se desecha en el país, sería asumir la responsabilidad de procesarlo en un nuevo producto.