La rutina cambiada en el problema bélico que tiene más de un año

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Un hombre con uniforme militar camina por un pasaje subterráneo que sirve de protección de ataques inesperados en el problema bélico que lleva más de un año entre Rusia y Ucrania.

Cuando suenan las sirenas de alarma, que ya son habituales cada día, en este y otros lugares similares alguna gente busca protección inmediata.

En estos días de septiembre, las temperaturas vienen bajando en los países mencionados después de un verano donde no ha existido turismo como antes de la pandemia o antes del 24 de enero del 2022.

En un par de meses, como ya es conocido, el frio llegará y volverá a ser factor importante en los escenarios de campo como en las ciudades bajo la amenaza armada.

Caminar y permanecer en los refugios son rutinas que hace unos años no se practicaba ni en Rusia ni Ucrania. Fue durante la Segunda Guerra Mundial cuando en estos países la gente ya usaba instalaciones subterráneas.