Perros en situación de calle: Una problemática global que requiere soluciones locales

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La preocupante situación de los perros en situación de calle no es exclusiva de una ciudad o país en particular; es un desafío global que afecta a muchas comunidades.

El vínculo entre los seres humanos y los perros se remonta a miles de años atrás. Esta relación ha evolucionado hasta convertir a los perros en los compañeros más leales de la humanidad. Sin embargo, no todos los perros tienen la fortuna de contar con propietarios responsables. Muchos de ellos, lamentablemente, terminan viviendo en las calles, donde enfrentan todo tipo de adversidades, como maltrato, enfermedades, hambre y accidentes automovilísticos, entre otros.

Los perros callejeros son aquellos que carecen de un hogar permanente o que, aunque tengan uno, pasan la mayoría o la totalidad del día en las calles debido a la negligencia de sus propietarios, el abandono o incluso por haber nacido en esta situación.

En un contexto más amplio, los perros en situación de calle son un problema que ha afectado a casi todos los países durante mucho tiempo. Sin embargo, algunos lugares han logrado avanzar en la solución de este problema de manera notable. Un ejemplo destacado es Países Bajos, que en el siglo XIX enfrentó una situación crítica con una gran población de perros callejeros, lo que llevó a la propagación de enfermedades como la rabia y al sufrimiento de estos animales.

Ante esta situación, el gobierno neerlandés tomó medidas audaces y efectivas. Introdujo leyes de protección animal, de salud y bienestar animal que prohibieron el abandono de mascotas y garantizaron que los propietarios brinden los cuidados adecuados a sus mascotas. Aquellos que no cumplan con estas leyes enfrentan duras sanciones, incluyendo prisión y multas sustanciales.

Además, el gobierno asumió los costos de las castraciones y organizó campañas masivas de esterilización gratuita para las mascotas, logrando que el 70% de la población canina fuera esterilizada. También implementó impuestos elevados en la compra de perros de raza para desalentar la cría indiscriminada y promover la adopción.

Actualmente, en Países Bajos, los animales de compañía gozan de derechos equiparables a los de los seres humanos, y la sociedad es más inclusiva, permitiendo el ingreso de mascotas a la mayoría de los establecimientos.

En contraste, en Bolivia, la problemática de los perros en situación de calle persiste y se agrava en muchas ciudades. A pesar de que se han presentado proyectos de ley para abordar esta cuestión, todavía queda mucho por hacer.

La experiencia de Países Bajos muestra que es posible abordar de manera efectiva el problema de los perros en situación de calle mediante una combinación de medidas legales, educación ciudadana y esterilización masiva. Es crucial que otros países y comunidades tomen ejemplo y trabajen en conjunto para brindar un futuro más seguro y digno a los perros que aún sufren en las calles.

Fuente: LA PATRIA