Lucero Yaksic, un amor puro por la danza

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Lucero Yaksic es bailarina desde los tres años y docente desde los 12; sin embargo, también es licenciada en fisioterapia y kinesiología. Gracias a estas dos pasiones, se metió de lleno a la enseñanza de la danza con una visión transdisciplinaria, enfocada principalmente en el ballet clásico.

Con la experiencia de enseñar en el instituto Auza Arnez, Lucero decidió fundar su propia academia el 16 de julio de 2012. Ya con 11 años de experiencia, el emprendimiento que lleva su mismo nombre ha formado a cientos de niños en el arte de la danza.

Como toda iniciativa nueva, el ballet Lucero Yaksic inició desde cero, únicamente con la misión de impartir el amor por la danza, no desde un punto de vista competitivo en su totalidad, sino con el objetivo de incorporarla en el resto de su vida y siempre aspirar a mejorar constantemente.

�??Iniciamos con niños de tres años, y con el pasar del tiempo se fueron uniendo más personas de más edades hasta formar un cuerpo de baile juvenil y otro de mayores. Luego participamos en escenarios a nivel departamental y a nivel nacional, donde siempre fuimos reconocidos con los primeros lugares�?�, precisó la bailarina.

A su éxito también se sumó su afiliación a la Confederación Interamericana de Profesionales en la Danza, una de las pocas academias en lograrlo, lo que permite a sus estudiantes estar certificados para profesionalizarse a nivel internacional; gracias a eso actualmente uno de sus estudiantes está pasando clases en Buenos Aires, Argentina.

IMPORTANCIA DEL BALLET

Tras años de experiencia, Yaksic aseguró que el ballet clásico en la madre de todas las danzas, al aprender estas técnicas se vuelve más fácil aprender cualquier otro estilo y así lo hacen constantemente en su academia.

TRABAJO INTEGRAL

Es importante entender la danza como un estudio integral, la profesora de danza explicó que al margen de la técnica de baile es crucial hacer seguimiento a la postura de los bailarines, trabajar en ejercicios que mejoren su flexibilidad sin alterar su crecimiento, y muchos otros aspectos para concebir a un bailarín como un ser completo.

EL FUTURO

Con un amplio repertorio que ya presentaron en los escenarios, en ballet Lucero Yaksic planea llevar sus obras propias a otros departamentos del país. De igual forma, la bailarina está considerando abrir sucursales de la academia en otras ciudades, para que más niños tengan la oportunidad de conocer el mundo de la danza.

�??Nuestro mayor objetivo también es que nuestros alumnos logren profesionalizarse, para que ellos puedan impartir clases a otras generaciones de nuevos bailarines�?�, manifestó.

UNA BAILARINA COMPROMETIDA

Lucero expresó su profundo agradecimiento a sus padres por impulsar su pasión desde que era muy pequeña, pues cuando ella comenzó no había una academia exclusiva de ballet clásico en Oruro, por lo que saliendo del colegio tenía que viajar cada fin de semana a Cochabamba para tomar clases intensivas.

Cada vacación también iba a Salta o Buenos Aires para seguir mejorando su técnica, y con el propósito de compartir todos sus conocimientos en Oruro, consiguió su certificación a nivel internacional como docente.

Enfatizó en que un gran bailarín no siempre es bueno ensañando, o los profesores de danza algunas veces no son buenos bailarines; sin embargo, explicó que cualquier falencia se trabaja con el tiempo, por lo que siempre aprende de colegas e incluso de sus alumnos, y se mantiene al tanto de la constante evolución en el mundo de la danza.

MENSAJE PARA LA NI�?EZ

�??Los sueños dejan de ser sueños en el momento que uno decide volverlos realidad�?�, con esa frase Lucero incentivó a los niños a probar la danza como una salida de la rutina y el estrés. Aseguró que este arte envuelve a las personas y permite expresar las emociones con libertad.

�??Yo los invito a que prueben la danza, sino algo tan rígido como el ballet clásico, algo diferente, porque siempre les dará felicidad�?�, finalizó.