La letra no entra con sangre

Una niña de seis años está internada en el Hospital del Niño en La Paz, después que su padre y su abuela la golpearan, dejándola con 12 días de impedimento, porque no aprendía las lecciones que le enseñaban en la escuela. La menor relató qué la metían en un recipiente con agua fría y la golpeaban constantemente.

Antaño se decía que �??la letra entra con sangre�?� y se golpeaba a los estudiantes que no podían entender o aprender algo, a veces se les daba coscorrones, otras se les pegaba con palos o cinturones, algunos pegaban en las manos con la regla, también habían �??correctivos�?� como jalar la oreja, el cabello o zarandear con fuerza a la persona.

Sí, los niños son personas, aunque aún se escucha decir que los niños no entienden nada, que hay que enseñarles a golpes, eso no es así, porque mientras más golpes reciba, dependiendo también de dónde los reciba, en lugar de ayudarle a comprender es posible que se le cause una lesión qué lo llevará a empeorar su situación.

Existen muchos trastornos del aprendizaje, pero no es culpa de los niños y mucho menos es planificado, muchos de ellos heredan cierta condición de la familia, o es posible que sea fruto de algún descuido durante el embarazo, también influye la alimentación y la forma de crianza.

Asimismo, si el niño no recibió estimulación temprana, es decir desde su nacimiento hasta los seis años, es probable que le cueste más aprender las cosas después de ese rango de edad, además, es probable que tenga algún trastorno y no se le haya detectado a tiempo para corregirlo con la adecuada estimulación.

La estimulación temprana sirve para dos cosas, primero detectar si el niño presenta alguna dificultad en su desarrollo, y segundo, ayudarle a reafirmar sus capacidades y potenciarlas para que su crecimiento sea óptimo y alcance su mayor potencial cuando sea más grande.

Asimismo, no se puede dejar todo en manos de los educadores, los padres tienen que involucrarse en la enseñanza y desarrollo de los niños, apoyar desde casa en las prácticas o ejercicios que se les da en la escuela para reforzar el aprendizaje, además que hay técnicas para que los niños logren captar mejor y retener lo aprendido.

El castigarlos o golpearlos no hará que mejore su conducta, ni su rendimiento, por lo contrario, lo empeorará, y el adulto solamente está descargando su furia y frustración sobre el cuerpo del niño, además que le enseña al menor a tener escasa tolerancia a la frustración y baja inteligencia emocional.

Los padres deben investigar é interiorizarse sobre las técnicas de estudio para apoyar a sus hijos, observar el comportamiento de los niños y si éste tiene dificultades para aprender debe llevarlo con un especialista, y finalmente enseñar con el ejemplo no con violencia, porque ahora más que nunca se sabe que la letra no entra con sangre.