Un duro golpe contra el narcotráfico

Es llamativo que en medio de las pugnas por el poder en el partido de Gobierno, se haya hecho una mega operación en la que se afectó al menos 1,9 millones de dólares al narcotráfico, pero aún más asombrosa fue una opinión del ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo explicando lo siguiente "Nos llama la atención las declaraciones del expresidente, Evo Morales, quien aseguró que desde el Ministerio de Gobierno, estaríamos persiguiéndolo o haciéndole seguimiento usando a las fuerzas policiales".

En medio de semejante operación, ¿a qué viene el comentario?, ¿nuevamente circularán las acusaciones y contra denuncias de narcotráfico incrustado en el poder gubernamental?

El exmandatario asegura que el actual ministro de Gobierno le persigue, y casualmente las operaciones realizadas, según la prensa boliviana, estarían en territorio dominado por el ahora líder del Movimiento Al Socialismo, MAS y expresidente de Bolivia, Evo Morales.

El área donde se realizaron las operaciones contra el narcotráfico, es considerada zona roja porque es ahí donde existen las megafábricas del estupefaciente, y es allí donde Morales tiene su vivienda y su centro político de operaciones, además de ser sede de la radio Kausachun Coca desde dónde éste dirige un programa Dominical.

Fuera de las pugnas políticas que existen en el partido de Gobierno, en la zona de operaciones, es decir, el Trópico de Cochabamba, la Policía desarticuló una �??organización criminal�?� vinculada a secuestros. Fueron aprehendidos Nabor L., Mateo R. y Alfredo R. que formaban parte de una banda delincuencial junto a otras nueve personas.

La operación realizada este fin de semana consistió en la intervención de 27 fábricas y 7 laboratorios de cocaína en el Chapare, que funcionaban desde hace aproximadamente tres años. Y ya el 15 de mayo, las fuerzas antidroga habían destruido un megalaboratorio que tenía la capacidad de producir hasta 100 kilogramos de clorhidrato de cocaína por día.

El fin de semana reciente, para la realización de la intervención contra el narcotráfico, se invitó a periodistas a presenciar dicha operación y el ministro del Castillo señaló que "¡Somos un gobierno de acciones, no de especulaciones o discursos!", mediante su cuenta de Twitter.

Durante el primer gobierno del MAS hubo bastante tolerancia frente a las tareas de interdicción, inclusive se amplió el cato de hojas de coca por familia, se expulsó a la DEA, con el argumento de que la Policía boliviana era apta para la lucha contra el narcotráfico, pero al parecer eso fue motivo para que aparecieron nuevos laboratorios de fabricación del estupefaciente.

Por otra parte, los mismos cocaleros comenzaron a mostrar, con orgullo, su actividad ilícita mediante las redes sociales, haciendo gala de montones de dinero que habrían ganado pisando coca, que, saben todos, es destinada al narcotráfico.

Con las operaciones guiadas por el actual ministro de Gobierno, al parecer se quiere dar un mensaje diferente, de cero tolerancia a ciertos delitos que han estado manchando la imagen de la Policía y por ende del Ministerio de Gobierno, y de esa manera realizar una especie de limpieza y redimirse.