Las milicias no son una novedad

Pese a que muchos se alarmaron tras el anuncio del expresidente Evo Morales de querer formar milicias o policía sindical, conocidas también como "ronderos", en el Chapare, para resguardo, porque considera que las fuerzas del orden que hay en Bolivia de manera oficial, no cumplen con el respectivo resguardo en esa región.

Señaló que en esa región hay mucho movimiento de extranjeros, pero no existe una oficina de migración, según Morales, es porque en esos lugares, los policías, ligados al Gobierno, ocultan drogas, cometen ilícitos y nadie hace nada, señaló que no hay presencia del Ministerio de Gobierno.

Además, aseguró que hay infiltrados que, como en el tiempo de la DEA, los policías se camuflan haciéndose pasar por choferes o por trabajadores para espiar a los cocaleros, que según Morales no son delincuentes ligados al narcotráfico.

Sin embargo, el organizar milicias armadas no es una novedad, es cierto que las fuerzas reconocidas son la policía y el ejército, pero en la época del Movimiento Nacionalista Revolucionario, MNR, Víctor Paz Estenssoro organizó con los campesinos las milicias qué debían protegerlo.

Sin embargo, esos grupos parapoliciales o paramilitares no estaban bien entrenados, ni tenían una disciplina, sino que se trataba de grupos que reunidos se envalentonaban bebiendo alcohol, por lo que eran agresivos en la defensa del partido gobernante, pero no tenían estrategias, ni tácticas, necesarias para funcionar como un verdadero ejército.

Se dice que cuando Morales era mandatario, había un grupo de ciudadanos, que cuidaba al exmandatario.

El problema es que esos grupos de choque generan zozobra, violencia y abusos a la sociedad, o al menos entre quienes piensan diferente y son sus "enemigos". Asimismo, la idea ya rondaba por la cabeza de Evo, cuando estaba en Argentina, ya que señaló que volvería a Bolivia para organizar milicias, pero en este caso se trataría de la creación de grupos irregulares, lo cual está tipificado en el Código Penal.

De todos modos, si eso llegara a ocurrir, el Gobierno tiene el derecho y la obligación de detener, a través de sus fuerzas del orden, a esas personas que se agrupan para formar grupos irregulares los cuales, y van a causar solamente problemas, es por eso que las fuerzas del orden deben hacerlos desaparecer.

Para eso también tanto el ejército como la policía tienen grupos de inteligencia, bien entrenados para desbaratar ese tipo de agrupaciones irregulares, inclusive si se desata la violencia las fuerzas tienen todo el derecho y la obligación, de cuidar a la población y deshacerse de esos grupos irregulares quizás metiéndolos presos uno a uno.

Es cierto que en otros países existen esos grupos paramilitares o parapoliciales, creado supuestamente para que defiendan a sus gobiernos, pero en Bolivia solamente están reconocidas la Policía y el Ejército, además el Gobierno ya señaló que no aceptará la presencia de grupos irregulares en el territorio boliviano.