Gladys Martínez

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EJEMPLO DE CONSTANCIA Y SUPERACI�?N

Superación y constancia son algunos de los términos que podrían definir a Gladys Martínez, una mujer nacida en la alta tierra de los Urus que no dejó que una adversidad se interpusiera en su camino; es así, que decidió seguir sus sueños en el exterior, hasta convertirse en uno de los ejemplos de éxito más inspiradores.

El año 1997, Gladys se vio obligada a salir de su natal Bolivia por un caso de acoso sexual ejercido por su jefe, mientras ella trabajaba en la Caja Nacional de Caminos. Con su renuncia, luchó por que le paguen todos sus beneficios para iniciar una nueva vida y velar por el futuro tanto de ella como de su pequeña hija, a la que criaba sola.

�??Comencé con los estudios de inglés y luego como asistente de enfermería. Trabajaba en eso, pero yo no era feliz, quería hacer algo más así que inicié trabajando como asistente de manager en la empresa de mi exesposo�?�, narró Gladys.

Es ahí donde surgió la idea de abrir una compañía de limpieza, motivada por la cantidad de gente latina que llegaba al país del Norte y no podía conseguir un trabajo, incluidos miembros de su familia. Así nace �??Service Industries�?�, ahora con 20 años de trayectoria que reflejan el trabajo duro de Gladys y su gran inspiración para ayudar a los demás. Pese a que le dijeron que si se iba a Estados Unidos terminaría limpiando baños, Gladys estaba dispuesta a comen-zar otra vez. En Bolivia, se desempeñó en altos cargos como redactora de actas en la Cámara de Diputados, la primera mujer en desempeñar ese rol, y también fue secretaria del Parlamento Andino.

No obstante, al llegar a un nuevo país, su mentalidad cambió y sin importar los puestos importantes que ejerció en Bolivia, su propósito era ganar dinero dignamente, sin importar el trabajo que sea, para sacar adelante a su hija.

Con esa firmeza, materializó su compañía teniendo a la comunidad latina como su principal beneficiaria, pero ese no es el único grupo en el que se enfoca, pues mientras la empresa creció, decidió también brindar ayuda a institucio­nes que trabajan con cáncer de mujeres y niños; además, al tener un nieto de seis años diagnosticado con autismo, tam­bién se involucró con esa causa.

"Yo soy la penúltima hija de una familia que siempre estuvo llena de amor. Mi papá, Emeterio Martínez, ayudó mucho mientras fue ministro de Vivienda en una oportunidad, y él nos decía siempre que debíamos ayudar al prójimo sin impor­tar quién era", recordó la empresaria.

ORURO EN EL CORAZ�?N

Gladys se define a sí misma como una orureña feliz. Tras hacer la primaria en la Escuela San José, tuvo que irse a La Paz por un tiempo debido al trabajo de su padre. No obstante, la vida le permitió volver y terminar sus estudios en el Liceo Pantaleón Dalence, de donde salió bachiller; además de ser el lugar en el que le enseñaron a tener sueños y a seguir reglas, aseguró.

Con motivo del centenario que festejó hace poco esta institu­ción educativa, Gladys fue invitada a volver a su tierra, donde le dieron un recibimiento caluroso organizado por el plantel docente y administrativo, padres de familia y exalumnas; además, le dieron un trofeo que se llevó a Estados Unidos y que acomodó en un lugar especial de su casa.

La líder de "Service Industries" aseguró que todos en la comunidad latina de Virginia, e incluso gente externa, saben que ella es orureña porque es motivo de orgullo a donde sea que va; claro ejemplo es que no pierde una oportunidad de hablar y recomendar el Carnaval de Oruro a todos los que planean llegar para vivirlo. Al estar lejos, las veces que puede llegar es prioritario que coma un rostro asado, un cordero como solo saben cocinarlo en Oruro, un tradicional charque­kan, los deliciosos apis del mercado Campero y un infaltable helado de canela. También visita a la Virgen del Socavón, patrona de esta tierra a la que recuerda siempre por la hermosa juventud inocente que vivió.

UN MENSAJE

Gladys no perdió la oportunidad de dirigirse a la juventud orureña, especialmente a las mujeres, que piensan que por estar en una ciudad fuera del eje central no podrán surgir, o que las metas son inalcanzables.

�??Los sueños si se cumplen, cuando uno es consecuente y tiene una meta. No es fácil, pero tampoco imposible. A todas las mujeres orureñas les digo que se puede triunfar porque cada uno hace su destino; sigan sus sueños, sean positivas y aprovechen las oportunidades que les da la vida�?�