La fiesta debe continuar

Al parecer esa es la premisa siempre que está cerca o presente el Carnaval de Oruro, Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad, ya que cuenta la historia que cuando los chilenos invadieron el Litoral boliviano, se celebraba esta fiesta por lo que las autoridades no hicieron nada, esperando que pasara el Carnaval para atender ese asunto.

Y mucho no han cambiado las cosas, ya que mientras se desarrolló el Festival de Bandas y el �?ltimo Convite, vecinos de la junta vecinal Puerta del Sol llevaban a efecto una huelga instalada a puertas de la Alcaldía, hace más de tres días, el ambiente de fiesta convivía con el de protesta y eso ocurre a menudo en la ciudad de Oruro.

Sin embargo, hubo protestas que perjudicaron totalmente el normal desarrollo del Carnaval, una de las peores fue hace aproximadamente 7 u 8 años, cuando un grupo de chóferes del transporte pesado realizó un bloqueo de caminos que dejó a la ciudad de Oruro bastante disminuida en público espectador de la

peregrinación.

Por otra parte, tantos acontecimientos que opacaron la celebración del Carnaval, dejaron algún trauma en la gente, que cuando llega la época festiva, entre febrero y los primeros días de marzo, la población se pone susceptible de que salga algún decreto que perjudique a los bolivianos, como un �??gasolinazo�?� u otra medida similar.

Pero, nervios o no, la fiesta continúa, por lo que también se atribuye la pérdida del Litoral, por celebrar el Carnaval, y es que también son días en que prácticamente toda la urbe está paralizada porque todos vuelvan su atención a la música, el baile, los atuendos de fantasía y típicos, además de la comida y la bebida que no faltan en esta festividad.

Sin embargo, el discurso del Carnaval se modificó bastante con el nombramiento por la Unesco, de Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad, ya que se colocaron vallas a lo largo de la ruta por donde peregrinarán los devotos, ya que la interacción que había entre público y danzarines cambió radicalmente.

Volviendo al tema principal, pase lo que pase seguramente todos estarán pendientes de cualquier novedad, con la fe puesta en que nada malo pasará, sino todo lo contrario, nada podrá detener a la Obra Maestra, que se espera que este año se realice en todo su esplendor, ya que es la segunda gestión post pandemia y los ánimos de festejar sin temor al coronavirus están flotando en el aire.

Así es que, pase lo que pase, seguramente todos coincidirán en que la fiesta debe continuar.