Cuando no gusta el mensaje se mata al mensajero

La frase del epígrafe es un refrán norteamericano que significa que, cuando alguien da una mala noticia algunas personas lo toman como si el que da la mala noticia fuera el responsable de lo que está sucediendo. Es como culpar a los periodistas de lo que sucede sólo porque están cumpliendo su misión de informar y mostrar lo que está pasando.

Literalmente, un activista afín al partido de Gobierno, el Movimiento Al Socialismo, MAS, que además fue postulante a Defensor del Pueblo, incitó al asesinato de los periodistas y propuso incendiar las instalaciones de la red televisiva privada Unitel, además que algunos periodistas ya fueron agredidos por efectivos policiales durante las represiones contra ciudadanos cruceños, quienes protestan por el encarcelamiento de su gobernador.

Pascual Mamani Marca, es el activista que incita a asesinar a periodistas mediante las redes sociales, identificado como "yo Pascual".

"El problema es que matando al mensajero la noticia no cambia. Es por esto que esta actitud suele darse en personas poco o nada inteligentes", analiza un experto en liderazgo empresarial.

La Asociación Nacional de la Prensa, ANP, emitió alertas por las agresiones sufridas por periodistas de diferentes medios, pero sobre todo los que trabajan en la red Unitel. Según la red de monitoreo de la ANP, uno de los policías es procesado por estos atentados contra los periodistas, pero no es nada comparado con el daño que han hecho más efectivos "del orden", ya que son varios los involucrados no sólo en las agresiones a periodistas, sino también en actos vandálicos que fueron filmados por algunos vecinos.

Pese a los llamados de atención, las observaciones de la red de monitoreo, de las asociaciones de periodistas y otras entidades, tanto policías como civiles continúan agrediendo a los trabajadores de la prensa de manera impune.

Representantes de la Sociedad Interamericana de Prensa, SIP, solicitaron al Gobierno, hace años, que se cree un sistema de protección y seguridad para periodistas, que ya están vigentes en Brasil, Colombia, Guatemala, Honduras y México, y se están por implementar en Paraguay y Ecuador. Pero en Bolivia estas recomendaciones fueron ignoradas.

Según el Índice Chapultepec de la SIP 2021-2022 muestra que Bolivia cayó al lugar 16 entre los 22 países medidos. Este indicador es un barómetro anual que mide las acciones institucionales que afectan las libertades de prensa y de expresión en 22 países de las Américas. La medición se hace sobre la base de los principios de las declaraciones de Chapultepec y Salta de la SIP.

Bolivia ocupa ese lugar porque, según se informó "el Gobierno mantiene ataques y estigmatizaciones en contra de periodistas, e intentos de judicializar y perseguir el trabajo periodístico que incomoda al oficialismo".

Pero analicemos, como señalamos líneas arriba, matando al mensajero no se evitarán las malas noticias, lo que se tiene que hacer es un cambio de actitud y dejar la violencia atrás para dar paso al diálogo sincero y coherente, y en lugar de buscar culpables se debe buscar soluciones.