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Warning: session_start(): Cannot start session when headers already sent in /home/lapatri2/public_html/impresa/index.php on line 8 Ley antidiscriminación en Chile, un paso clave - Periódico La Patria (Oruro - Bolivia)
Racismo, homofobia, xenofobia, machismo y conservadurismo a ultranza son lastres del tejido social chileno que tendrá que encarar la ley antidiscriminación aprobada la última semana.
Chile sólo dio el primer paso frente a un desafío mayúsculo. Así opinan avezados analistas locales sobre el texto legal avalado por el Congreso y cuyo trámite cobró celeridad tras el brutal asesinato de un joven por su condición homosexual.
La iniciativa quedó lista para convertirse en ley, luego que el Senado le dio su visto bueno por 25 votos a favor, tres en contra y tres abstenciones, los seis últimos de parlamentarios de la coalición gobernante de derecha.
Previamente la había aprobado la Cámara de Diputados por 90 votos a favor y 16 en contra. Se le opusieron mayoritariamente de igual modo congresistas de la ultraconservadora y oficialista Unión Demócrata Independiente (UDI).
El proyecto inició su tramitación en 2005, impulsado por organizaciones sociales y grupos defensores de los derechos humanos, y desde entonces había permanecido empantanado en el poder legislativo por el veto de la ultraderecha chilena.
En estos siete años ha habido 823 casos de discriminación, algunos brutales; y 17 asesinatos basados en la orientación sexual o en la identidad de género. Ese es el costo que ha pagado Chile para tener una ley antidiscriminación, subrayó el presidente de Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), Rolando Jiménez.
Cuando el pasado 3 de marzo un grupo de apariencia neonazi golpeó salvajemente y torturó durante horas al joven homosexual de 24 años Daniel Zamudio, la sociedad chilena quedó conmocionada y volvió la mirada hacia el engavetado tema.
El caso sacudió a la opinión pública y no dejó indiferente a ningún sector político.
Antes de dejarlo abandonado en un parque de Santiago, los cuatro atacantes de Zamudio le marcaron incluso tres esvásticas en su cuerpo con el gollete de una botella.
Zamudio quedó en estado de coma, con fracturas en el cráneo, en el tórax y en las extremidades. Tras semanas de agonía en un hospital, finalmente murió.
Las organizaciones sociales retomaron el combate a favor de la aprobación de una ley antidiscriminación. La brutalidad del crimen trascendió las fronteras nacionales.
Tres días después de la muerte del joven, la ONU pidió también al Congreso chileno la aprobación de una normativa que considerara como agravantes los actos motivados por cuestiones de orientación sexual e identidad de género, según los estándares internacionales.
La exigencia de la ONU fue hecha en Ginebra por Rupert Colville, vocero de la oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos, quien calificó la agresión a Zamudio de violento acto criminal.
Corville indicó que lo ocurrido constituye un nuevo recordatorio sobre la gravedad y prevalencia de la violencia homofóbica en el mundo.
Al interior de Chile, el presidente Sebastián Piñera aseguró que el crimen no quedaría impune. Es el compromiso del Gobierno contra toda discriminación arbitraria y con un país más tolerante, afirmó.
Paralelamente el Ejecutivo pidió suma urgencia para la aprobación del proyecto de ley. "Queremos una sociedad más tolerante y por eso es tan importante esta ley", apuntó el mandatario.
La normativa se aprobó en definitiva, no sin forcejeos de puntos de vista y discrepancias de parlamentarios que una comisión mixta de congresistas debió dirimir.
Sin todos los atributos reclamados por el mundo social, pero como un paso clave para avanzar fue evaluada la ley por sus demandantes.
También la familia de Daniel Zamudio mostró su satisfacción por el nuevo instrumento legal.
Nada ni nadie devolverá la vida a nuestro hijo. Sin embargo, el proyecto servirá para prevenir y enfrentar discriminaciones que afecten a otros jóvenes y eso nos da cierta paz, señaló una carta dada a conocer a la opinión pública.
La nueva ley define como discriminación arbitraria toda distinción, exclusión o restricción cuando se fundamente por motivos tales como la raza o etnia, la nacionalidad, la situación socioeconómica, el idioma, la ideología u opinión política y la religión o creencia.
También por la sindicación o participación en organizaciones gremiales o la falta de ellas, el sexo, la orientación sexual, la identidad de género, el estado civil, la edad, la filiación, la apariencia personal y la enfermedad o discapacidad.
Sobre el asesinato de Daniel Zamudio, el presidente de Movilh manifestó que no debieran olvidarse las responsabilidades políticas, éticas y morales de quienes han considerado en Chile a los homosexuales como inmorales, desviados, pecadores o degenerados.
"Ellos dan el sustento de la violencia homicida que afectó a Daniel Zamudio y a muchos otros", agregó.
Movilh y otras organizaciones sociales opinan que al Estado elaborar las políticas públicas y arbitrar las acciones que sean necesarias para promover y garantizar el pleno, efectivo e igualitario goce y ejercicio de los derechos y libertades de las personas.
Sugieren debe trabajarse sobre todo el aspecto de la prevención y no sólo el ángulo punitivo.
A juicio asimismo del senador socialista Juan Pablo Letelier no sólo el camino punitivo alcanzará a poner fin a las expresiones de discriminación por género, raza, etnia, nacionalidad, orientación sexual o condición socioeconómica.
Es necesario promover un sistema escolar que eduque a nuestros niños y jóvenes en el respeto a la diversidad, la no discriminación y el reconocimiento que todo ser humano tiene los mismos derechos y la misma dignidad, expresó.
Por su parte Andrés Soffia, director ejecutivo de la Fundación Iguales, llamó la atención en la necesidad de enfrentar también la discriminación laboral. "El maltrato a nivel social nos pasa día a día", sostiene.
"La ley es más sancionatoria que educativa, entonces debiese haber campañas de difusión ", recomienda.
Recalcó que no se trata "solamente de la tolerancia y del respeto por la diversidad sexual, es por la diversidad en general; la discriminación está latente en todos los sectores".
Hay mucho racismo dando vuelta en Chile, asegura la destacada representante mapuche Natividad Llanquileo. A los blancos, a los europeos, se les abren las puertas; a los negros, a los indígenas, a los bolivianos o peruanos no, se les niega, argumenta.
Coincide con ese punto de vista el coordinador del Movimiento por la Diversidad Sexual, Gonzalo Cid, para quien habría que pensar sobre todo en una nueva institucionalidad en Chile y en normas que apunten a la prevención.
Tenemos una sociedad, asevera Cid, muy intolerante. Hay una discriminación muy fuerte hacia los pueblos originarios, hacia los inmigrantes y hacia la diversidad sexual, y en forma menos violenta, pero también apreciable, hacia las mujeres y los discapacitados.
Lamentablemente, afirma, casos como el de Daniel Zamudio se repetirán.
La agresión y posterior muerte de Daniel Zamudio, señaló en un comunicado la Corporación Parque por la Paz Villa Grimaldi, Monumento Nacional donde radicó el principal centro de torturas y muerte de la dictadura, es un termómetro del Chile real.
En esta ocasión, añadió, la víctima fue un joven que asumía su homosexualidad. En otros, ha sido la condición de ser emigrante peruano, mapuche, viejo, pobre, discapacitado.
Ser distinto o distinta es peligroso en las calles de Chile, enfatizó la declaración.
(*) Corresponsal de Prensa Latina en Chile
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