¿Por qué los afros no están en el Carnaval de Oruro?

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Bolivia es un país discriminador. En concreto más cuando se menciona a los afrodescendientes. Al grano, viene la parodia del gran humorista orureño Pablo Osorio, cuando reconoce que el caporal es una danza que representa con latigazos a los (y calla) �??A unas personas que no viven aquí, son de muy lejos y que son poquitos�?� (termina aclarándole a un afro)�?�.

Osorio en realidad narra desde el mundo lúdico del humor, donde a él todo se le está permitido, que si así nos cuesta reconocer como ciudadanos de a pie al verdadero origen de las danzas pesadas y livianas de procedencia afrodescendiente: Institucionalmente, desde el Carnaval de Oruro.

¿Cómo seremos de excluyentes dejando a la Saya Afro boliviana sin que se muestre? ¿Por qué los afros no están en el Carnaval

de Oruro?

En toda Latinoamérica la inclusión con la cultura afro siempre ha sido nuestra lacra. Pero, el logro excitante este año sin duda, fue la asunción de Francia Marquéz a la Vicepresidencia de Colombia. Por lo menos en la mayoría de esos países, sus danzas con todo el �??tumbao�?� africano que tiene,

son sobrevaloradas.

¿Y en Bolivia? Después nos quejamos de plagio. Puro chauvinismo.

Ahora les explico con chuis. Vale este argumento con periplos testimoniales, de casi todo mi continente. �?nico. Ínclito. Con esencia auténtica. Relatos que tengo, que nacieron a raíz de una comida cualquiera entre latinos en España.

Con conocimiento de causa y estudio académico, afirmo que en España están asentados ciudadanos de todo el continente latinoamericano. Muchos países no necesitan visado. Esta última década, desde Centro América su llegada fue prodigiosa.

Al caso, una pausa aquí y un dato migratorio importante: El botón de muestra escalofriante sobre la situación migratoria de Centro América, cuando CNN titula: �??En abril de este año han migrado 19.000 niños solos hasta Estados Unidos�?�. Muchas de sus madres, están en España y trabajan para pagar a �??coyotes seguros�?�.

En esa reunión, a manera de dinámica. ¡Vaya mi ocurrencia! Les pedí a los latinos de nueve países que con un video en YouTube muestren una danza de su país, alimentando el ambiente de un corto ego/sosiego latino.

Y empezamos. Los catrachos (de Honduras), al ritmo de la danza Punta retumbaron hicieron una fiesta con sus caderas. La Parranda del grupo Kazzabe decía �??Sei sei bei�?� que en lengua afro garífuna es �??muévelo�?�. Orgullosos recordaron su legendario �??Watanegui consupu, watanegui wanaga, luli ruami wanaga�?�. Bien por los catrachos, punto alto. ¿Qué latino no ha bailado Sopa de Caracol en los 90?

Ni bien se pararon, triunfantes se sintieron los queridos pinoleros (de Nicaragua) con su danza del Palo de Mayo y su retumbante canción afro: �??Tululu Pasa�?�. Orgullosos dijeron �??es un pedido de lluvia del pueblo afro y es en honor a la Diosa de la fertilidad Mayaya�?�.

Y al ritmo de su caja afroperuana. Perú la rompió esa noche. Inevitable no mencionar a �??La Foquita: el 10 de la calle�?� una reciente película que hace honor al jugador afrodescendiente, de quien su madre bailaba este ritmo solo para que él tenga unos botines de fútbol. La jugada de Jefferson Agustín Farfán Guadalupe clasificó a Perú al mundial de 2018. Aquel golazo provocó una ensordecedora alegría, que dicen, habría ocasionado un corto sismo en Lima por los brincos.

Y la reunión olía �??a caña, tabaco y brea, usted está en Cali, ay mire y vea�?�. ¿Qué decir de la salsa de Cali, Colombia? Y de la bachata dominicana que por excelencia convencional, la industria discográfica, nos encargó decir que si no lo bailamos, no somos �??buenos latinos�?�.

Cuando era el turno a Bolivia, o sea el mío. Se me ocurrió bailar un �??Chevere que Ché�?� de Llajtaymanta; y de yapa una Aromeñita / Morenada. Les gustó mucho.

Y con un video Afroboliviano tenía a todos bailando, recién. Por eso cabe el título y las preguntas incisivas ¿Por qué los afros no están en el Carnaval de Oruro? Si es lo que la gente quiere.

En una de esas tantas reuniones con la ACFO, nos dijeron que la Saya no podía estar en el Carnaval porque no forma parte de las danzas con instrumentos de bronce. No tengo nada en contra de los Wititis, pero ellos si están. Y los afros ¿por qué no?

Si, esta orureña de nacimiento; pero afro de corazón, junto con Lorena Barra (Q.E.P.D.) en 2009 con una salteña todo el día, aplanamos las calles de Oruro y La Paz y gastamos nuestros últimos pesos para nuestros pasajes. Todo por las reuniones con la ACFO y luego pasar la voz en La Paz.

Cansadas, de frío, pero llevábamos entre ceja que la Saya ese 2010 debía estar sí o sí en el Carnaval de Oruro. Y lo logramos, junto con otros dirigentes del Movimiento Cultural Saya Afroboliviana (MOCUSABOL) en aquel entonces. Entramos como novenantes a la media noche. Y la alegría no podía en nuestros corazones.

Aún recuerdo ese diciembre en 2009, cercano el Carnaval, todo debía estar listo. Codo a codo. Las dos. Nada podía contra las dos. Copleando cánticos de los tíos afros, mientras me enseñaba sus mejores pasos. Aquella Diosa de �?bano me contó tantos secretos

sobre su cultura.

Y nuestra preocupación era grande: ¿Dónde más podemos ir a apadrinar a fin de que los afros de las comunidades yungueñas de Naranjani, Colpar, Chicaloma, Caranavi etc, lleguen y estén bien hasta llegar a Oruro y gasten

lo mínimo?

Teníamos a Stege como padrinos de Sandwichs y refrescos. A cerveza Auténtica, que no se si aún existe, ese 2010 nos regalaron unas bellas chamarras con nuestro logo MOCUSABOL l.

Hasta padrino de flota teníamos. Qué orgullosos llegamos a Oruro. �??Yungueña�?�, diciendo en la flota. El pecho nos crecía. Todos en Oruro miraban a los afros. Y hasta recuerdo que un caporal centralista dijo: �??Uta estos son malditos para bailar�?�. Y quedó la clásica foto de nuestro segundo/primer intento de los afros en Oruro.

Porque segundo, casi una década atrás los afros estaban invitados a Oruro. Error gran error, los pusieron a bailar detrás de los Tundiquis.

¡Ay lo que sienten ellos cuando ven bailar a los Tundiquis! No hay otra cosa más, que les hierva la sangre. Lo digo tal cual. El afroboliviano ve la parodia de lo que representa esa danza, y, sino,

pregúntenles.

Y los afros no regresaron sino hasta aquel inolvidable 2010. A las 7 am terminamos exhaustos y felices todo el recorrido para terminar a los pies de la Mama Candicha. Los próximos años organizamos kermeses en La Paz y ya teníamos para los pasajes.

En enero de 2015 la ACFO visitó las oficinas de MOCUSABOL en La Paz y la emoción fue doble porque recordaron que hay leyes antidiscriminación que protegen a los afros. Y quedó un abrazo sellado. Los afros entraron temprano en la mañana y se lucieron. No pude acompañarlos. Los vi por Facebook, ya en otro país. Lloré y no podía creerlo. Todo valió la pena.

Pero, ¿por qué los afros aún no están en la lista del Carnaval de Oruro? ¿Qué más tendrían que hacer para ser incluidos? Es más ya ni siquiera van. ¿Por qué los afros no están en el Carnaval de Oruro? Señor Jacinto Quispaya, presidente de la ACFO, ¿Es posible retomar un diálogo con MOCUSABOL?

El mundo está atónito económicamente frente a una guerra sutil, con amenaza atómica inclusive. Mientras estamos casi medio superando una pandemia global sin precedentes.

Emocionante fue ver reiniciarse al coloso de mi Oruro; pero seguimos individualistas folklóricamente. ¿Los afros seguirán ausentes en este Carnaval 2023 también?

Nada agradecidos estamos con el legado afrodescendiente. Seguimos un discurso simplista de su llegada e historia en Bolivia: Vinieron en los barcos; explotados en las minas de Potosí, sus pulmones no aguantaron y huyeron al trópico en lo que hoy son Los Yungas de La Paz. Con el pasar de los siglos se abolió la esclavitud; y hace décadas por la escasez de trabajo sus jóvenes se fueron a las ciudades a bailar saya para ganarse dinero. Nada más errado.

El afrodescendiente construye, vive, sueña. Fue reconocido como Tesoro Humano Vivo en 2004. Aún los tenemos, pero nos cuesta darles un espacio merecido. El comediante Osorio concluyó en esa parodia cómica que �??hay como tres, cuatro o cinco danzas, perdón�?��?� Si deberíamos pedir perdón al afro en Bolivia porque seguimos en la opresión de su espacio cultural.

Es orureña y Doctora en Comunicación en la Universidad de Sevilla �?? España