Suben los precios de la canasta familiar

Pese a la subida que tuvieron algunos precios de la canasta familiar, el ministro de Economía cree que existe estabilidad en los precios porque, según señaló, algunos productos tuvieron una baja mientras que otros subieron, compensándose los precios.

Los incrementos en la canasta familiar tienen una incidencia en todo tipo de artículos, cuando sus precios suben, también tienden a hacerlo los precios de otros productos o servicios.

Mientras el Gobierno anuncia, a través de sus ministros, la subvención de fertilizantes y otros insumos para mantener los precios estables de algunos productos, cuya tendencia es la subida, otros artículos suben de manera sutil, pero afecta al presupuesto familiar de los bolivianos.

Quizás se debería explorar otras alternativas financieras para sustentar el modelo económico del Gobierno y que la recuperación en este ámbito sea tangible, porque el aumentar las subvenciones a más productos puede tener un efecto contraproducente, ya que, como lo señalaron los analistas económicos, las subvenciones acarrean deudas.

No obstante, los ministros insisten en que no se debe escuchar ni tomar en cuenta lo que dicen los analistas, pero esa actitud de victimizarse ante cualquier situación que pone al Gobierno contra las cuerdas, es sólo una manera de distraer la atención de la población hacia otros asuntos y eso no beneficia en nada a nadie.

Otro factor que provoca el incremento de precios, en productos de primera necesidad, es la prohibición de importados desde Perú, por dar prioridad a los productores bolivianos, pero si se liberan tanto las importaciones como las exportaciones, no sólo se podrá bajar los precios de ciertos artículos, sino que se daría certidumbre al país y se tendría el anhelado crecimiento económico del país.

Es verdad que algunos productos importados llegan de contrabando, y esa actividad ilegal hace que haya movimiento de la economía, pero tiene ese componente, que va contra la ética de un país, mata la industria nacional y por lo tanto se busca erradicar dicha actividad ilícita.

Sin embargo, al menos durante el confinamiento por la pandemia del coronavirus, se pudo ver la voluntad y el coraje de la población boliviana, que tuvo que reinventarse para subsistir y adaptarse a otros rubros.

Por ejemplo, aparecieron los taxis movidos con la fuerza humana, inclusive se pensó en tener un sindicato, pero al liberarse a las personas de su encierro, la situación volvió a cambiar, y se dejaron de lado muchos emprendimientos para volver a las oficinas o al rubro al que se dedicaba antes de la pandemia.

En Bolivia, la gente tiene una gran voluntad de mejorar, de reinventarse y de resurgir después de una crisis, pero también hay personas que no están de acuerdo con los cambios, no están dispuestas a pagar el precio, ni esforzarse, pero a veces el camino más largo y sinuoso es el que lleva al éxito.