Warning: inet_pton(): Unrecognized address in /home/lapatri2/public_html/wp-content/plugins/wordfence/vendor/wordfence/wf-waf/src/lib/utils.php on line 28
Warning: session_start(): Cannot start session when headers already sent in /home/lapatri2/public_html/impresa/index.php on line 8 LO POL脥TICO Y SUS MAL ENTENDIMIENTOS - Peri贸dico La Patria (Oruro - Bolivia)
Apenas se produce alg煤n movimiento interpelador al poder o la autoridad sea c铆vico, ciudadano, vecinal o de cualquier otra 铆ndole para pedir o reclamar alguna situaci贸n, desde la realizaci贸n del censo de poblaci贸n y vivienda hasta la instalaci贸n de una alcantarilla en un barrio, se ensaya desde los interpelados una suerte de cuestionamiento: !!! es pol铆tico !!! dicen, tratando as铆 de menoscabar o descalificar esos pedidos o reclamos y especialmente, a sus actores. Tal pareciera entonces, que los 煤nicos que pueden hacer pol铆tica fueran quienes detentan el poder o la autoridad, lo que nos estar铆a vedado a los ciudadanos. Nada m谩s absurdo.
Para empezar, desde lo constitucional resulta que toda persona sin excepci贸n alguna, tiene el derecho civil para formular peticiones de manera individual o colectiva e incluso de obtener una respuesta de manera formal y pronta. Naturalmente, nos asiste tambi茅n el derecho a la libertad de reuni贸n (temporal o casual) o asociaci贸n (permanente) de forma p煤blica y privada, eso s铆, con fines l铆citos.
La misma Constituci贸n abunda adem谩s cuando desarrolla nuestros derechos pol铆ticos, se帽alando que todos los ciudadanos tenemos el derecho de participar libremente, en la formaci贸n, ejercicio y control del poder pol铆tico, sea directamente o por medio de nuestros representantes, de manera individual o colectiva.
As铆 el estado del arte, insisto en que resulta absurdo que los interpelados -ante su falta de argumentos o ignorancia, con fines distractivos o algo peor- solo espeten que las movilizaciones son pol铆ticas como si ello fuera algo censurable; cuando como acaba de demostrarse, m谩s all谩 de la justicia o raz贸n de los pedidos y en algunos casos de los mecanismos, lo que los ciudadanos hacemos es simple y llanamente, ejercer un derecho fundamental que se halla positivizado en la mism铆sima Constituci贸n y, como se ha visto, esta franqueado como no pod铆a ser de otra manera, en favor de toda persona, sin discriminaci贸n de ninguna clase.
Entrando a la naturaleza de los pedidos o solicitudes, lo que los ciudadanos hacemos cuando por ejemplo -podr铆an se帽alarse miles- solicitan la realizaci贸n del censo de poblaci贸n y vivienda; el cierre de mercados ilegales; la ampliaci贸n de una ruta de transporte urbano hacia un barrio alejado; la iluminaci贸n en una calle; el cierre de un lenocinio; mayor y mejor seguridad ciudadana; la instalaci贸n de un sem谩foro; el adecuado funcionamiento del servicio de limpieza en una plazuela; que la administraci贸n de justicia sea tal y no un mecanismo perverso de persecuci贸n y encubrimiento; que una autoridad rinda cuentas de sus gastos realizados con nuestra plata o que la C谩mara de Diputados pague su contribuci贸n al Psiqui谩trico; queda inmerso precisamente bajo esos derechos fundamentales a la petici贸n y al ejercicio del control del poder pol铆tico.
Por donde se le vea, se trata de distintas acciones ciudadanas que hacen a lo pol铆tico y chorrean de pol铆tica. Advi茅rtase, que hasta etimol贸gicamente el t茅rmino proviene del lat铆n politicus y este del griego politik谩 que es una derivaci贸n de polis que designa aquello que es p煤blico, o politik贸s, que significa precisamente relativo al ordenamiento de la ciudad o los asuntos del ciudadano. Tiene que ver tambi茅n, con el arte de la negociaci贸n para conciliar intereses.
Desde este espacio de ejercicio de opini贸n, he insistido a lo largo de los ya varios a帽os que tengo el privilegio de difundir mi pensamiento que uno de los peores d茅ficits que el ciudadano boliviano padece, tiene que ver con ese ejercicio efectivo de ciudadan铆a: desde el poder, les han sembrado a algunos el convencimiento que reclamar nuestros derechos es algo casi indebido, un pecado contra el poderoso estado y la sacrosanta autoridad, aunque tambi茅n existen grupos que s贸lo entienden el lenguaje de la violencia (de y hacia). Ateng谩monos a aquello de Benjamin FRANKLIN: ??La primera responsabilidad de cada ciudadano, es cuestionar la autoridad?.
Para tus amigos:
隆Oferta!
Solicita tu membres铆a Premium y disfruta estos beneficios adicionales:
- Edici贸n diaria disponible desde las 5:00 am.
- Peri贸dico del d铆a en PDF descargable.
- Fotograf铆as en alta resoluci贸n.
- Acceso a ediciones pasadas digitales desde 2010.