Patrimonio cultural en riesgo

Nuevamente nos referiremos al edificio patrimonial que requiere de la urgente atención de las autoridades orureña, se trata de la "Casa de Correos y Telégrafos", que está en franco deterioro, tanto es así que llegó a Oruro un profesional entendido en museos y centros culturales, del Ministerio de Culturas, Descolonización y Despatriarcalización, para verificar el estado de la edificación.

Luego de observar in situ la situación de este edificio, declarado años atrás como Patrimonio de los orureños, el profesional redactó un informe en el que se recomienda la declaración como "Patrimonio en Emergencia", para lograr su conservación y refacción, a fin de que este inmueble pueda ser rescatado.

En el informe detalló los motivos por los que el edificio se encuentra tan deteriorado, y entre esas razones destacan, la desatención por parte de las autoridades, la falta de mantenimiento, malas intervenciones y por supuesto las inclemencias del clima y el deterioro natural por el paso del tiempo.

En sus tiempos de gloria, la Casa de Correos y Telégrafos de Oruro tenía mucho movimiento, ya que entre los servicios que ofrecía, los ciudadanos podían enviarse correspondencia inclusive dentro de la ciudad, ya que antaño hombres y mujeres eran más románticos y se enviaban cartas mutuamente, a manera de mostrar la importancia que tenían los pretendientes y pretendidos, respectivamente.

Además, recibir una carta, después de meses, en una era en que las comunicaciones no eran tan inmediatas, era todo un acontecimiento, inclusive se decía que si una mariposa blanca pasaba muy cerca de una persona, ésta recibiría una carta, por lo que todos estaban atentos a detalles como que, si el insecto de esas características pasaba o no cerca de uno.

Quizás para muchos jóvenes de hoy es difícil imaginar lo que significaba recibir noticias, mediante cartas, de sus hijos, esposos, nietos, hermanos, padres que llegaban del frente de batalla, en especial durante la Guerra del Chaco, ya que los hombres salían desde lugares tan lejanos a ese territorio, como Oruro, La Paz, Potosí, Cochabamba y otros departamentos.

Antaño se daba tanta importancia a las cartas, que inclusive algunas personas, ilustradas, trabajaban como escritores de cartas, para que las misivas tengan un lenguaje elegante y una caligrafía impactante, y es por eso que también, tanto la ortografía como la caligrafía eran de suma importancia y se enseñaba en las escuelas a mejorar en ambos aspectos.

Además, el mismo hecho de caminar hasta el correo era una aventura, un paseo, que se volvía aún más interesante por dos razones; una, era por la emoción de recibir las cartas de los seres queridos que se encontraban lejos y otra, porque era una oportunidad para apreciar la vistosa y elegante arquitectura del edificio. Pero todo eso se quedó en el pasado, sepultado y olvidado, cuando se cerró el Correo y se eliminó ese servicio para dar paso a las empresas de courier y a los correos electrónicos, pero no se puede reemplazar el valor arquitectónico e histórico de un edificio como es la Casa de Correos y Telégrafos de Oruro.