Sábado 30 de julio de 2022
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El adolescente cree que nunca le ocurrirá nada; es en esta etapa que no escuchan ningún consejo, mensaje o recomendación, tanto de los padres o de las personas que quieren ayudar.
Los riesgos cambian su vida, pero ellos, son seguros que en su pensamiento es que no les pasará nada; esta actitud demuestra que ellos se valen por sí solos.
Sin embargo, esto dura poco, hasta pasar su propia experiencia y en muchos de los casos ya no hay remedio y se pierde las oportunidades.
Conocer que las malas influencias, la adicción al alcohol o a las drogas, son factores que inicialmente no se consideran, pero cuando ya son adictos es difícil revertir.
Otro aspecto es el descubrimiento de las necesidades corporales como es la sexualidad, experimentándose deseos corporales naturales, pero también sin límites y sin responsabilidad, provocando daño a sí mismo o a la pareja y a un tercero, como es el niño, quien nada tiene que ver con la irresponsabilidad del que engendró.
Cuando se hace un hábito el consumo de alcohol, el ser humano sufre una transformación en la conducta, se vuelven agresivos, pero también se debilitan, hay rechazo de las personas que aman, como hay aceptación desde el punto emotivo, también cuando tienen problemas se protegen en el alcohol.
