Agua que no beberás no la dejes correr

Si bien el dicho señala “agua que no has de beber, déjala correr”, ya no se aplica en la actualidad porque el desperdicio de agua ha llevado a la humanidad a una crisis y falta de este líquido elemental, por lo que en lo posible se debe preservar este valioso recurso natural y el dicho quizás debería ser ahora “agua que no beberás, no la dejes correr”.

El Pacto Global en Alianza con la Red Bolivia con Agua, conformada por la Fundación FH Bolivia, Water For People Bolivia, Hábitat para la Humanidad Bolivia y Aguatuya, realizaron una actividad en la que informaron la situación del país en relación con el agua potable.

Mientras que Marcio Oblitas, director de la Fundación FH, señaló que “no es justo que cerca a 20% de población no tenga acceso al agua y un 30% a 35% no disponga de saneamiento básico, y por eso existe una necesidad de aunar esfuerzos públicos y privados”, Metáis recomendó cuidar el recurso hídrico.

En muchas ocasiones y de muchas maneras se envió el mensaje de que se debe cuidar el agua, llamada por los ambientalistas “oro azul” por su valor para la vida en el planeta. Algunas de las recomendaciones que se hacen es que se debe dejar correr el agua el menor tiempo posible, limitar las duchas a unos 5 minutos como máximo, lavar los trastos en un recipiente, usar agua reciclada para el baño, los pisos y los autos, y en lo posible con baldes y no con manguera, reparar las fugas, por ejemplo.

En Oruro, ya se advirtió que en poco tiempo el agua comenzará a escasear, porque la población sigue creciendo y junto con ella la necesidad de consumir más agua, pero los principales lagos que se tiene en el departamento cada vez reciben menos agua y está más contaminada.

Nadie está dimensionando la verdadera magnitud del problema, y no se ha buscado una solución duradera para evitar la contaminación del lago Uru Uru, por ejemplo, porque las aguas servidas siguen llegando hasta el humedal, lo mismo que las aguas ácidas de la mina San José.

Además que el volumen del espejo de agua no aumenta porque el líquido del lago Titicaca, mucho más grande y profundo, que llega a través del río Desaguadero, ha sufrido una disminución de su caudal porque los regantes desvían el curso natural para alimentar sus plantaciones.

Es urgente elaborar políticas para evitar la contaminación de los pocos humedales que quedan en el altiplano, y mientras que las autoridades encuentren la manera de subsanar todos los problemas relacionados con la provisión de agua, los ciudadanos debemos hacer nuestra parte cuidando el valioso recurso natural, para evitar que se agote y deje a esta parte del mundo sin vida por la falta del líquido elemental.