Sábado 26 de marzo de 2022
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En los últimos años, el número de personas que se someten a intervenciones estéticas se triplicó y desde inicios de este siglo, los tratamientos mínimamente invasivos aumentaron exponencialmente. La bichectomia, o extirpación de las bolsas grasas de bichat, consiste en la reducción quirúrgica del exceso de grasa de las mejillas, con el fin de obtener un rostro más definido. No es un procedimiento quirúrgico nuevo, mas está de moda en el país, pero existe hace varios años y es muy habitual. Se practica desde los años 60, en Europa o Norteamérica.
La bolsa de Bichat es pequeña, pesa entre ocho a diez gramos, y de volumen tiene entre ocho y diez centímetros cúbicos, este tejido no tiene ninguna función mayor en la cara, más que dar un poco de soporte y relleno a la mejilla; por lo tanto, al sacarla no genera ninguna secuela funcional. Aunque es poco riesgosa, se ubica en un área delicada de la cara, muy cercana a algunas terminaciones del nervio facial, de vasos sanguíneos y del conducto parotídeo, espacio por el que viaja la saliva desde la glándula parótida hacia la boca.
