Sábado 05 de febrero de 2022
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Hay una delgada línea entre opinar y criticar, recuerda que existe la crítica constructiva y la destructiva, también están los críticos y los criticones.
Esa diferencia se basa prácticamente en que la una ayuda, construye, edifica y nos impulsa a mejorar, pero la otra destruye, baja la autoestima, lastima y es totalmente innecesaria.
Para distinguir entre criticar y opinar lo que debemos hacer es:
•Preguntarnos si ¿alguna vez realizamos algo que tenga que ver con lo que estamos a punto de criticar?
•¿Somos expertos para decir qué está bien y qué está mal?
•Si no has hecho mejor lo que estás a punto de criticar no hables.
•Si vas a dar tu opinión, puedes limitarte a decir me gustó o no me agradó por tales razones, pero decir que algo está bien o está mal sin tener conocimiento de ello es crítica destructiva pura.
•Tampoco está bien dar tu opinión cuando no la pidieron y si quieres opinar, pero no te lo pidieron lo mejor es preguntar “con mucho respeto, ¿puedo darte mi opinión?”, o “¿te gustaría conocer mi punto de vista?”
