La minería aporta alto porcentaje impositivo

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De acuerdo al informe del principal ejecutivo del Servicio de Impuestos Nacionales (SIN), Mario Cazón, en torno a la recaudación de la gestión del año pasado por concepto de impuestos, que fue de 27.324.1 millones de bolivianos, considerada como positiva la contribución del sector de minería, consignando la actividad de minerales metálicos y no metálicos, significó uno de los mayores ingresos a favor del presupuesto nacional, pese al grave problema que generó la pandemia del corona virus, alterando importantes sistemas productivos.

Como hecho preocupante se revela que las recaudaciones del Impuesto Directo a Hidrocarburos (IDH), disminuyeron por tercer año consecutivo, lo que muestra una clara declinación en los cálculos productivos del sistema de los hidrocarburos que no llegaron a compensar las estimaciones de rendimiento previsibles para el año que concluyó con déficit reconocido.

El ejecutivo del SIN sobre el tema de recaudaciones impositivas, señaló que en la gestión 2021, el aporte impositivo de las actividades mineras y metalúrgicas fue de 1.003,7 millones de bolivianos, 33.7% más que el 2020, pero menor a la obtenida el 2019, cuando se sumó 2.751.1 millones de bolivianos, atribuyendo ese buen ingreso tributario a la actividad de minería y metalurgia en el país

Es reconocida la contribución de importantes sectores productivos, como minería y metalurgia al presupuesto general de la Nación, sabiendo que su distribución beneficia a las universidades, municipios y Gobernaciones, además de anticiparse que en próximas gestiones podrá contribuir a concretar varios proyectos de desarrollo social en comunidades que definan contribuir con una parte de financiamiento para obras de crecimiento urbano.

Distritos en los que se desarrollan actividades mineras, además de producción metalúrgica son lo que perciben cierto porcentaje de los impuestos que genera la exportación de producción minera, considerada de muy bajos montos, frente a los de inversión y costo de operaciones, tanto en la minería privada, chica y mediana, como en la estatal que a diferencia de la primera, carga sus gastos a una cuenta estatal de operaciones mineras. La cuenta de utilidades de ésta actividad es dependiente directa de la vigencia de precios internacionales de minerales, por lo mismo con fluctuaciones variables por temporadas. El hecho es que con más o menos aportes, la minería contribuye con sus impuestos al presupuesto nacional.