Entre las inundaciones y las fiestas

Pese al receso de fin de año, las autoridades municipales de Oruro tienen que trabajar horas extras porque debieron decidir, en tiempo récord, si se autorizaba o no las fiestas de fin de año, debido a que las cifras de contagios están subiendo vertiginosamente, quizás en Oruro menos que en otros departamentos, pero sí existe el riesgo inminente de contagios.

Finalmente se decidió mantener el horario de circulación en el municipio, y se prohibieron las fiestas en celebración del Año Nuevo, para evitar mayores problemas en ese ámbito, pero queda un problema por resolver y es el de las inundaciones en diferentes barrios del municipio de Oruro.

Los vecinos de distintas zonas de la ciudad reclamaron la atención de la Alcaldía, puesto que sus casas están inundadas y sus cimientos remojándose, al punto de que muchas viviendas están en peligro de colapsar, es más, en una de las calles hubo un sifónamiento quedó un gran boquete y la vía tuvo que ser cerrada para evitar accidentes.

Asimismo, pidieron que se forme un comité interinstitucional para trabajar en la solución a las inundaciones de la ciudad, ya que la lluvia no da tregua y continúa anegando los barrios que menos atención reciben, los mismos vecinos declararon que a los diferentes alcaldes les pidieron ayuda porque cada año tienen el mismo problema.

Por otra parte, las autoridades declararon que no hay dinero para atender la emergencia climática, pero se gastó Bs. 100 mil para unas figuras representativas de la Navidad, y aunque la simbología quizás lo valió, pero ese monto podía servir para atender este tipo de emergencias, quizás comprar motobombas y ayudar a los vecinos a sacar el agua de sus casas.

Los propios ciudadanos se ocuparon de limpiar las alcantarillas para evitar que se acumule el agua, ahora, cada alcalde que llega al poder se ocupa de rehacer las aceras, que desde la gestión de Edgar Bazán están en ese afán, pero olvidan encargarse de otras obras que sirvan para evitar los problemas de inundaciones.

Si las autoridades ediles se reunieron para determinar si se autorizaba o no las fiestas de fin de año, pero con la emergencia sanitaria y climática es difícil que los vecinos afectados deseen festejar, por lo que sería interesante que se haga efectivo el pedido de los periodistas independientes y se reúnan las autoridades municipales para solucionar la crisis.

Para tener qué festejar, en primer lugar, se tienen que solucionar todas las emergencias y problemas que se presentaron por las lluvias, en segundo, pensar en qué obras son necesarias para evitar futuros dilemas como los que se presentaron este fin de año, y en las próximas celebraciones de Año Nuevo existan verdaderos motivos para organizar las fiestas que se quieran.