Zapateando con el MAS

Hasta el día de hoy nadie entiende por qué Gabriela Zapata salió de la cárcel, algunos otros no entienden por qué eso pasó justo en un día “importante” para el Movimiento Al Socialismo, MAS, ya que una marcha de siete días, “en apoyo” a Luis Arce, con el lema “por la Patria”, llegó a La Paz y se esperaba un gran fiestón, pero la noticia de la liberación de la exnovia de Evo Morales, se robó toda la atención.

Existen dos hipótesis para tal coincidencia; una es que se la liberó ese día para distraer la atención de los medios de prensa y de la sociedad para que no se notase “el fracaso” de la marcha que llegaba con menos personas de las contabilizadas por el partido azul. Otra, señala que fue para satisfacer a Evo ya que, según dijeron, la marcha no fue por la Patria sino por Zapata.

Zapata, ese día salió rodeada de policías, civiles y periodistas, como toda una celebridad, con gafas de sol, sonriendo y saludando, obviamente no devolvió ni un centavo del daño económico causado a Bolivia, pero estuvo presente en las pantallas de los noticieros por muchos días.

Pero durante el Gobierno transitorio, ella envió un audio, que se filtró al público, en el que se dirige al entonces ministro de Gobierno, Arturo Murillo a quien le dice que teme por su vida, que tenía miedo a que Morales la hiciera desaparecer o la matara. Dijo muchas cosas que Morales en un momento había negado, aseguró que sí tuvo el hijo que el expresidente negó, y describió a ese hombre como un esclavizador que la tenía amedrentada y prácticamente secuestrada, aseguró que él no le dejó terminar la escuela.

O sabe más de lo que contó, o mintió tanto que la dejaron en libertad para que no siga perjudicando la imagen de Morales, que al parecer, con las marchas y protestas busca mantenerse vigente y trata de recuperar la presidencia a toda costa, al menos bajo el punto de vista de los analistas.

Actualmente no se sabe quién miente más, porque el partido azul monta unas escenas y cuando ya no les conviene una versión de lo que contaron, simplemente la cambian, para luego afirmar que se les malinterpretó o les tergiversaron los periodistas, y siguen zapateando sobre las cabezas de los opositores, los apresan sin pruebas y dejan en libertad a otros que hicieron daño al país, y hasta le dan trabajo.