Defensa a ultranza

Campesinos patriotas intelectuales, obreros y trabajadores de otros gremios laborales consideran que cada boliviano tiene como lema la defensa a ultranza del sistema democrático, el respeto escrupuloso de los derechos ciudadanos antes que ceder a la tentación del autoritarismo.

Esa postura, que muy poco fue divulgada, es un tácito rechazo a la amenaza de que se desarrolle una revolución tal como lo dijo el jefe del Movimiento Al Socialismo.

En criterio general, la alocución de Evo Morales es una provocación para cometer un delito contra la democracia y el pluralismo con graves consecuencias.

Según ese argumento tampoco es factible que nuestra patria quede en manos de una fuerza radical extremista que promueve el combate entre personas con la intención de consolidar un Estado donde el socialismo se perpetúe en el poder ejerciendo sus propios privilegios y sea inamovible.

Tenemos que hacer sobresalir que nuestra nación se precia de incentivar la facultad natural que tiene el hombre de obrar de una manera o de otra con plena libertad sin detenerse ante las dificultades que se presenten.

Por tanto, queda abrogada la creación o surgimiento de grupos irregulares multinacionales que magnifiquen la confrontación poblacional y repriman a instituciones representativas para quebrantar la ley a favor de una doctrina política hostil que está ansiosa de causar la agresión armada sin consideración alguna.