Sequía y contaminación causan desazón en Khochi Piakala y Karavi

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La sequía a causa de lluvias y la contaminación por la minería, son las causas que originan desazón en los comunarios de Khochi Piakala y Karavi en el departamento de Oruro, poblaciones circundantes a la cuenca baja del Río Desaguadero.

El domingo 14 de noviembre, voluntarios del Colectivo “Wasi Pacha” (Casa tierra), visitaron ambas comunidades con el objetivo de conocer la realidad ambiental del lugar, interactuar con sus habitantes y llevarles esperanza mediante una campaña de arborización, así como compartir su cultura.

“Se visitó con el propósito de plantar también árboles en una zona árida y arcillosa. En época de lluvia se llena de agua, es un oasis verde y hermoso, donde las totoras crecen incluso hasta los dos metros. La fauna campea con la presencia de parihuanas, taracas, ashawas, patos, entre otros; pero en época seca, la totora y la flora se secan, queda un paisaje pálido, y la falta de agua tanto para consumo humano y animal, hace mucha falta”, afirmó el responsable del colectivo, Marco Flores.

“A su vez también sufren los impactos de la sequía, ya que deben llevar agua de la comunidad más cercana (Machacamarca) para su consumo, pero las ovejas, llegan a morir por la falta de este líquido elemento, tal como ocurrió estos días pasados, donde murieron más de una veintena de ovejas”, añadió.

COMUNARIOS

Contó Flores que con lágrimas, doña Petrona Canaza afirmó en quechua: “Por falta de agua estás crías han muerto, no tenemos agua, mi hijo de Machacamarca me lo trae en bidones, pero es para mí nomás, no alcanza eso para las ovejas y vacas, de doña Rufina han muerto más de 20 ovejas, en su canchón y a las orillas del río los ha enterrado, qué podemos hacer, nadie nos escucha, las autoridades nos han olvidado”.

“Agua deberían traérmelo, no tenemos agua para tomar, hasta mis ovejitas han muerto”, mencionaba doña Rufina, otra comunaria del lugar.

PLANTINES

Con algo más de 50 plantines y la labor de algunos comunarios, se hizo la plantación de arbolitos.

En la zona no existe árbol alguno, solo la flora autóctona como la t’ola, la paja, la totora, yareta, k’awchi, entre algunos.

“Estos arbolitos cuando crezcan, al menos nos dará sombra, concentrará el agua subterránea, y dará otra fisonomía a nuestra pampa”, mencionó el presidente de la Central de Comunidades de la Cuenca Baja del Río Desaguadero, Khochi Piakala, Ángel Flores.

“En los 60’s, 70’s, pescábamos pejerrey, antes de eso, mauri y kharachi, teníamos a montones, igual los huevos de las taracas y patos, yo fui uno de los fundadores de una de las primeras cooperativas pesqueras, la gente no consumía pescado, eso también hizo que muchos migren a las ciudades, en cambio hoy en día recién conocen, y ahora es caro, en cambio antes 1 boliviano era el kilo”, argumentó Flores.

CULTURA

A su vez, se compartió en la cita una deliciosa Sat’iña, un plato típico de la región, hecha a base de quinua y carne de cordero.

La comunidad tiene una gastronomía típica exquisita, como la q’ispiña, el pampa quwi, la thayacha de quinua o kañiwa, entre algunos.

También posee una arquitectura única, como los phutukus, t’uqras o las pirwas, todas hechas a base de ch’ampas (tepes), paja y barro del lugar, construcciones totalmente ecológicas.

En la comunidad, habitan en su gran mayoría personas de la tercera edad (la mayoría mujeres), los hijos migraron las ciudades capitales y otros países (producto de la contaminación minera, y la falta de ingresos), situación que poco a poco origina la desaparición de su vivencia, conocimiento y cultura.

VOLUNTARIOS

Por su parte, una de las voluntarias del Colectivo “Wasi Pacha”, Rocío Paredes, mencionó la realidad en que viven los habitantes de esas comunidades, afirmando que se debe volver con agua y ayuda.

“Pequeñas acciones desde adentro, generan convivencia, armonía, y coadyuvan en la sobrevivencia de nuestros pueblos y medio ambiente”, añadió Ronald Cruz, otro de los voluntarios del Colectivo.

“Wasi Pacha” tiene previsto para la primera quincena de diciembre, el estreno de un micro documental denominado: “Un Nuevo Mundo es Posible”, en el cual se mostrará parte de esta realidad de Khochi Piakala.

El 23 de noviembre se realizará la exhibición del documental: “La Sangre en Bolivia, de los Andes a la Amazonía”, durante el VIII Festival de Cine Radical en La Paz, El Alto y Cochabamba.

Se mostrarán problemas de contaminación minera que sufren los comunarios en esta región, y también la problemática extractiva en la Amazonía.

Fuente: LA PATRIA