TÉCNICAS DE ESTIMULACIÓN SEXUAL (Parte II)

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Continuamos hablando de las técnicas de estimulación sexual. ¿Conoces las zonas erógenas? Son áreas del cuerpo, como los genitales o no genitales, las nalgas, muslos, los pechos y el abdomen. El reconocimiento de estas zonas es esencial para el desarrollo de la respuesta sexual.

El instrumento de excitación sexual son las manos, ayudan en la estimulación y exploración táctil del cuerpo. Las caricias se vuelven más específicas a medida que la estimulación aumenta con preferencia hacia el área genital.

La sensibilidad de la piel de la mujer es frágil por lo que el hombre debe tener delicadeza con los tejidos de la vulva y la vagina. Tanto el hombre como la mujer son excitados por la estimulación de los pechos, la misma puede ser con las manos o la lengua.

El beso también produce estimulación, lo cual se práctica a través de todas las etapas.

Pocos hombres pueden retardar la eyaculación hasta la satisfacción de orgasmos múltiples que su pareja requiere.

Otra de las estimulaciones es el Cunnilingus es el acto de tocar la vulva de la mujer con la lengua. El Felatio que es la estimulación oral-genital que la mujer práctica al hombre, ambas estimulaciones apoyan en el logro del orgasmo en la pareja.

En esta práctica depende mucho de la aceptación de la pareja la cual puede ser limitada si hay inconvenientes en la misma.

Las posiciones en el acto sexual no tienen límites, la pareja puede escoger sus preferencias, desde luego una exploración de la variedad de posiciones le da sabor a la relación sexual, para no convertirse en monótona.

El orgasmo es una experiencia muy placentera y es la cúspide de gratificación física y emocional de la actividad sexual.

La respuesta fisiológica que produce el orgasmo es la misma aunque la estimulación se haya producido a través del coito, con la estimulación manual, oral, mecánica o las fantasías.

En ambos sexos altera la tensión arterial, el pulso, la respiración acelerada y más profunda, acumulación de sangre en los tejidos específicos y un explosivo alivio de la tensión muscular y nerviosa.

El hombre tiene un orgasmo acompañado de la eyaculación, en la mujer no, sin embargo, se ha demostrado que la respuesta de ambos sexos es muy similar y muchas veces paralelas.

Fuente: La Patria