Artesanos de miniaturas en Cala Cala reactivan su actividad

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Luego de un año de restricciones, los artesanos en miniatura volvieron y de a poco reactivaron su actividad en la conocida localidad de Cala Cala, donde desde el 14 de septiembre, venden sus productos en devoción al Señor de Lagunas, más conocido como “Tata” Laguna.

Los artesanos que se asientan afuera del templo, no tuvieron un 2021 productivo, sin embargo, a poco de terminar septiembre, buscan que los trabajos que fabrican, puedan ayudar también a otros, ya que se hacen llamar “los vendedores de sueños”.

“Lo que nosotros vendemos son ilusiones y sueños que se hacen realidad, comienza el 14, pero es todo septiembre. El año pasado por la pandemia no asistimos, pero la gente sí, porque hubo misas. Nosotros hemos sido golpeados porque recién nos estamos reactivando”, expresó la presidente de la Asociación de Artesanos en miniatura del Señor de Lagunas, Paola Bustos.

DEVOCIÓN

“Los importante es comprarse y pedirse con fe, también se puede pedir rebaja en las casas y autos, pero no en el dinero, en eso no hay que pedir rebaja. La gente viene a pedirse con fe y el Tata le cumple”, añadió Bustos.

Paola Bustos, actualmente es la presidente del sector y en los últimos días de la fiesta del “Tata Laguna”, busca ayudar a la gente a cumplir sus sueños y reactivarse por completo.

TRADICIÓN

El trabajo artesanal de doña Paola, así como el de otros artesanos, es una herencia desde sus antepasados, ella lo recibió de sus padres y otros, de su familia política como es el caso de don Miguel Palacios, quien tiene más de 20 años en el oficio.

“Vengo desde La Paz donde el señor de Lagunas a vender ilusiones y suerte. Yo estoy casi 25 años en esto, porque mis suegros han sido fundadores y vengo a esta población a vender. Es una fiesta que me gusta porque el Tata Santiago es muy milagroso. El año pasado no había casi ninguna feria, pero ahora ya nos estamos reactivando”, manifestó el artesano.

Luego de más de un año, los artesanos en miniatura viven los últimos días instalados en Cala Cala, donde venden sus productos a los fieles del Señor de Lagunas.

Fuente: LA PATRIA