El Parque de la Unión Nacional en la antesala de la primavera

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Una de las últimas tardes invernales invita a llegar al Parque de la Unión Nacional, un sitio que en sus pilares, ornamentos, vegetación y tierra, esconde una historia rica que enaltece a la Alta Tierra de los Urus.

El caminar por cada uno de sus pasillos se convierte en un momento de paz, es el encuentro de los sentimientos que nacen del corazón con las ideas de la mente, muchas veces originan una pelea interna que lleva a la reflexión profunda.

La vegetación del lugar es una postal para los ojos, porque no sólo ayuda a olvidar las preocupaciones, sino que alegra el alma por unos minutos. Al llegar al centro del lugar, se puede observar un emblema nacional, el Escudo y que hace algún tiempo fue complementado por los escudos departamentales.

Los paseos por el parque ya son tradicionales, allí se congrega impulsividad con experiencia, encuentros de amor o citas desconocidas, muchas veces terminan frente al altar de una Iglesia.

Antes que llegue la primavera, el lugar se ve muy coqueto, verde de esperanza, con un mensaje de la naturaleza, de que la vida se renueva de periodo en periodo, es cíclica sin un final, por ahora.

El lema de unidad es preponderante para este lugar, ya que de allí se inician una serie de actividades, desde culturales, sociales, científicas, políticas, sindicales, cívicas y carnavaleras, dándole un valor muy especial por ser el centro de concentración de los bolivianos.

(*) Es Periodista de LA PATRIA