Soy Terry y esta es mi historia....

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Hace mucho tiempo, allá por el 2013 estuve vagando por las calles céntricas de la ciudad, hacía mucho frío estábamos en pleno invierno, y en Oruro los inviernos son hasta fatales para animalitos desamparados y en situación de calle como yo lo era.

Y lo que más temía sucedió, una fuerte nevada cayó y me asusté mucho porque no sabía dónde refugiarme, hasta el rincón más oculto de las calles estaba congelado.

Traté de buscar refugio de puerta en puerta hasta que una familia me ofreció cobijo, tenía mucho miedo, me costó un poco confiar en ellos.

Después de unos días comenzaron a preguntar a los vecinos si alguien me conocía, pero nadie daba datos sobre mí o alguna persona que me conozca y fue así que decidieron darme un hogar definitivo, con el veterinario pudieron ver que tenía muchas cicatrices en mi cuerpito, garrapatas y otras dolencias que no fueron excusa ni impedimento para que me adoptaran.

ABUELITO

Hoy con casi 15 años soy un abuelito muy afortunado, he olvidado el pasado gracias a los cuidados y mimos que recibo, me gusta viajar, pasear, jugar y hace poco mi familia decidió adoptar a mi hermanito, también rescatado de las calles, muy pronto también él les contará su historia.

La próxima vez que vean un animalito hambriento, sediento o que necesite cobijo por favor ayúdenlo, la vida en las calles no es nada fácil y el destino sabrá recompensarlos ¡mucho más!

Fuente: LA PATRIA