Luto en el automovilismo por la pérdida del multicampeón Eduardo Chura Ramírez

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Eduardo Chura Ramírez, el multicampeón del “deporte fierro” dejó este mundo para emprender su carrera hacia el más allá dejando luto y dolor a nivel local y nacional dentro del mundo del “vértigo”, donde a lo largo de su carrera cosechó más de 500 trofeos y otras condecoraciones, siendo uno de los referentes y baluartes del automovilismo.

Cerca de las 22:00 horas de este viernes 11 de junio, el corazón de Eduardo dejó de latir, un paro cardiaco cegaría la vida de uno de los más condecorados corredores orureños a nivel departamental y nacional, llevándose consigo un sinfín de anécdotas y parte de la historia misma del deporte “fierro”, pero dejando un gran legado dentro de sus hijos que continúan con esta disciplina emulando los pasos de su amado padre que deja al mundo del automovilismo con el corazón acongojado.

Su pericia para la conducción, ingresar y salir de las curvas y entre curvas con una prolijidad única, además de tomar algunos riesgos con tal de conseguir el objetivo, desataba la euforia de los aficionados a los “fierros”, lo cual le valió para consagrarse a nivel departamental y nacional llegando a conseguir alrededor de 500 trofeos a lo largo de su carrera deportiva, seis veces campeón a nivel departamental, siendo conocido como el multicampeón orureño del automovilismo.

También fue presidente de la Asociación de Automovilismo Deportivo de Oruro (AADO), buscando mejores días para el “deporte tuerca”. A nivel nacional siempre fue en referente del automovilismo orureño, esta pasión por los motores los compartía con sus hermanos y luego con sus hijos quienes hasta hoy continúan con un legado especial plasmado en la escudería Chura.

Debido a diferentes circunstancias entre el 2011 y 2016 Eduardo Chura no estuvo con mucha actividad dentro del automovilismo, pero su trayectoria y méritos conseguidos fueron motivos suficientes para nombrarlo como “Héroe del automovilismo boliviano” codeándose en este reconocimiento con otros grandes nombres como el de René Rocha Barbery y Medardo Irigoyen, algo que ser tiene escrito dentro de la revista del mismo nombre que quedará como un reflejo claro de la carrera de estos grandes pilotos y sus navegantes.

En junio del 2016 se llevó adelante una competencia departamental que llevo su nombre como justo reconocimiento a su trayectoria deportiva. En la competencia “Oscar Crespo” del 2017, Eduardo volvería nuevamente a los habitáculos para ser parte de la competencia nacional dentro de la categoría Máster, donde definitivamente se retiró de la actividad en el deporte “fierro”.

Sin duda una de las más laureadas carreras del automovilismo orureño y nacional, ahora Eduardo está en el cielo surcando a toda velocidad las nubes recordado por siempre como el multicampeón del automovilismo, paz en su tumba.

Fuente: LA PATRIA