Detienen el paso del tren La Paz - Arica

Los transportistas de carga pesada lograron detener las pruebas del tren que operará el tramo La Paz - Arica, luego de una reunión que tuvieron con representantes del Gobierno, donde se asumió la decisión para evitar los bloqueos de caminos.

Sin embargo, como se sabe, “no se puede contentar a todos”, los transportistas de Cochabamba manifestaron su desacuerdo con el convenio logrado entre representantes del Gobierno y de los chóferes, invitaron a los gobernantes a solucionar la situación en una reunión que se realizará hoy en Cochabamba.

Mientras los transportistas rechazan la reactivación del tren La Paz - Arica, los empresarios y exportadores opinan que ambos sistemas de transporte pueden convivir sin preocuparse por las pérdidas, según señalaron a los medios de comunicación, los chóferes pueden llevar la carga hasta el tren y éste llegaría cargado al puerto de Arica, opción que tampoco aceptan los camioneros.

Ferrocarril Andino, que en el gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada fue capitalizado por chilenos, suspendió sus operaciones durante 16 años, pero ante el reclamo que surgió de incumplimiento al tratado de 1904, la empresa determinó la reactivación de la vía férrea entre La Paz y Arica para el cumplimiento de dicho acuerdo.

Por muchos años, la ciudadanía reclamaba el funcionamiento del ferrocarril, inclusive se llegó a sugerir que se rehabilite el tramo ferroviario entre Oruro y Cochabamba, además de la construcción de un tramo que una a los departamentos de Cochabamba y Santa Cruz, no obstante no se contaba con el rechazo de los transportistas de carga pesada, quienes se sienten amenazados con la reactivación del tren, por lo que inmediatamente después del anuncio hecho por la empresa, de la vuelta a funcionamiento del tren La Paz - Arica comenzaron a bloquear al menos cuatro vías terrestres que unen a diferentes departamentos, en rechazo a la decisión de Ferrocarril Andino.

Ya lo habíamos señalado en una anterior columna, en otros países, ambos sistemas de transporte conviven sin perjudicarse mutuamente y quizás en Bolivia no sería la excepción, pero los chóferes no se convencen de que vaya a funcionar.

Existe una clara contradicción entre lo que históricamente los bolivianos han venido reclamando por años y los intereses de los transportistas, sería apropiado que en ese tiempo en que no habrán nuevas pruebas, se analicen los pros y los contras de esta decisión, inclusive se podría estudiar el asunto formando una comisión en la que también participen los chóferes, para que esa opción de la reactivación no signifique un perjuicio para los transportistas, pero que tampoco se frene el desarrollo de nuestra patria por intereses muy particulares.

Según los transportistas el perjuicio a su sector es de 30 mil afiliados, pero el perjuicio para los bolivianos en general es mayor si no se permite operar al ferrocarril.