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Warning: session_start(): Cannot start session when headers already sent in /home/lapatri2/public_html/impresa/index.php on line 8 Maten a Sucre en Oruro - Periódico La Patria (Oruro - Bolivia)
Oruro fue el lugar elegido para la Asamblea de Dipu tados de los pueblos del Alto Perú, por Decreto de 9 de febrero de 1825 expedido en La Paz por Antonio José de Sucre; dicha Asamblea decidiría por el futuro de estas tierras. Permaneció el Mariscal de Ayacucho en La Paz hasta el 11 de marzo organizando el ejército, las arcas públicas y muchos otros asuntos de lo que después sería Bolivia. Tomando recaudos militares para acabar con el último de los generales españoles, que aun oponía resistencia, el general Olañeta, perfecto absolutista, acérrimo del rey.
Luego tomó rumbo a Oruro, sin saber que en esa Villa esperaban sus enemigos para asesinarlo. Quien ejecutaría personalmente tan vil acto, fue descrito por el orureño Comandante José Santos Vargas en su Diario de Campaña de la siguiente manera: sic [ Ya a las once del día bájase don Santiago Eccle, capitán de artillería de nación inglés, a pie nomas, llega a la playa de Curupaya y empieza a rastrear, ve pisadas de zapatos de munición, rastrea por la arena dentro del monte. Un soldado de los españoles le había estado mirando de una parte. A ese tiempo le llama a Ecle a hacer aguas mayores y se sienta a hacer la necesidad del cuerpo detrás de un peñón grande. Ve esto el soldado, va despacio y de repente trastuerna de tras de la piedra, le palmea en el culo de Ecle, dícele: - Ahora te haré cagar el alma – y presentase con su fusil. Ecle le habla con mucha humildad y le dice: - ¿Hermano qué quieres hacerme pues? Yo me presentaré nomás a tu jefe. Como no sabía de cierto dónde está no lo he alcanzado. Iremos luego, yo soy oficial de artillería. Con cierto disimulo de repente lo agarra al soldado de los pies y lo había estrellado contra el pedrón y a punta de dar golpes lo mata (como era alto y gordo era forzudo) y sálese para arriba que es a Taviña con el fusil a mano. Llegado al campo contó a los compañeros mas no se creyó, algunos van a ver porque no creyeron y ven al soldado muerto hecho pedazos la cabeza. 4 Nov. 1822]. (1)
Este capitán de artillería ingreso a la guerrilla el 2 de noviembre de 1819 y queda clara su fortaleza y astucia como guerrillero. También queda anotado en el Diario del Comandante Vargas: Sic. [Don Santiago Eccles. De nación inglés, de Escocia. El comandante general don José Manuel Chinchilla lo hizo capitán de artillería (éste se pasó de las tropas españolas) y concluyo la guerra en esta clase.](2) Este artillero escocés fue parte del ejército realista español y ese pasado de seguro influyo en sus equivocadas decisiones.
Sucre llegó a Oruro el 16 de marzo de 1825 y atendía sus recargadas labores cuando se enteró de los planes para asesinarlo, mostrando que los realistas seguidores del general Olañeta planificaron todo, ese general que peleó hasta con los mismos españoles y no aceptaba ningún mando. En carta de Sucre el mismo día de su llegada a la Villa, dirigida al general Pedro Antonio Olañeta, el mismo que pretende matarlo expresa: Sic. “… Al llegar a esta Villa me he encontrado con una novedad. El capitán Suizo Ecles ha presentado cuatro cartas de V.S. para don Francisco Ostria, don Miguel Zeballos, don Manuel Arguedas y don Hipólito Maldonado, todas escritas de letra de V.S. y rubricadas de su mano, ellas contienen unas libranzas para que estos sujetos den a Ecles ciertas cantidades de dinero para una comisión importante de que venía encargado. Ecles ha declarado que su comisión era para asesinarme y matar al general Lanza, y ha presentado el veneno que V. S. le dio para el efecto, que es una composición de opio y arsénico, añadiendo que otro agente de V. S. que anda por Cochabamba tiene la misma comisión con el premio de 16.000 pesos al que lo ejecute. ……Tal crimen no cabe sino en un corazón corrompido y malvado, y hablando sinceramente no había creído a V.S. capaz de él.” (3)
También el mismo día escribe Sucre al general José Miguel Lanza una misiva que expresa: “El capitán Ecles suizo, que algún tiempo sirvió con V.S. en los valles de Sica Sica y Ayopaya, ha sido comisionado por el general Olañeta para envenenarme y para asesinar a V.S. Este hombre acepto tan inicua comisión por 16.000 pesos de premio que se le ofrecieron, pero horrorizado él mismo del crimen de cuya ejecución se había encargado se ha presentado al cabo de unos días en Oruro delatándose, y ha presentado cuatro cartas de que son copias las adjuntas, escritas de puño y letra de Olañeta y rubricadas por él para los cuatro sujetos que se expresan, los cuales debían dar a Ecles el dinero necesario para su empresa”. Es claro que el hecho impactó a Sucre y sus cartas muestran profunda indignación. (4)
Interrogado Ecles cuando se entregó, expresó que “pensaba comprar al asistente del general que hace y sirve el chocolate, para que mezclara en el este veneno, pagando en oro su infidelidad”
El secretario de Sucre, Rey de Castro expresa: “Si el crimen se hubiese consumado ¡cuántas víctimas sacrificadas! Habríamos perecido todos los que almorzábamos en la mesa del general, pues no había diferencia de chocolateras, y la pasta que ví y tuve en mis manos, era más que suficiente para privar de la vida a un número mayor de personas de las que concurríamos a la mesa”. (5)
Es difícil imaginar como un guerrillero fiel a la patria durante varios años, pudo aceptar el encargo de matar a quien encarnaba la libertad por la que había luchado. Se sabe por el Diario del Comandante Vargas, que Eccles, en su campaña como guerrillero de la Patria en Ayopaya, demostró valentía y singular esfuerzo por la causa de la independencia y nunca dudó en demostrarlo. Es una verdadera paradoja de la historia, pero ya sea por el grito de su conciencia o el temor de enlodar su nombre, Eccles procedió como hombre honrado y termino delatando el criminal plan. La equivocación de su procedencia por Sucre, que lo considera suizo, tal vez muestre la vergüenza que Eccles sentía por su acción y ocultó en su interrogatorio su verdadero origen Anglo- Escocés. Tal vez de las High Lands.
Es seguro y con razón, que Sucre se sintió traicionado, pero fiel a su fama de magnánimo y piadoso con el enemigo, posteriormente perdonó a Eccles y fue puesto en libertad, además de otorgarle dos sueldos para que de inmediato se ausentara a su país. La nobleza de Sucre es increíble.
Por su parte el intrigante y traidor general Olañeta murió en la batalla de Tumusla el 1 de abril 1825, abandonado y traicionado por sus tropas.
José Antonio de Sucre, no sintió ninguna desconfianza por la Villa de Oruro, como se esperaría luego de lo ocurrido y siempre pensando en la próxima Asamblea que formaría la creación de Bolivia, en misiva del mismo día 16 de Marzo al Gobernador de Oruro Tte. Coronel Rufino Martinez le encargaba: “ Debiendo reunirse en esta Villa en 19 de Abril próximo la Asamblea General de las Provincias del Alto Perú, hago a U. el especial encargo de arreglar, asear y componer una casa que tenga una sala capaz para las sesiones de 40 o 50 diputados, y dos o tres piezas suficientes para los secretarios. Como este edificio solo servirá momentáneamente, los gastos que se hagan serán con esta consideración, pensando que debe haber aseo y decencia.” (6)
El héroe de Ayacucho, fiel a su misión en el Alto Perú, deja atrás el cobarde complot contra su vida y prosigue su tarea de reunir a la Asamblea, que por diversas causas no se llevó a cabo en Oruro, sino en la ciudad de La Plata hoy Sucre. Este pedazo de la Historia demuestra las cambiantes y extrañas maneras de la Guerra de Independencia que ocurrieron en Oruro y cuantos episodios existen aún por revelar y rescatar.
(1) José Santos Vargas. Diario de un Comandante de la Independencia Americana. 1814-1825. Trascripción, introducción e índices de Gunnar Mendoza L. Siglo XXI editores, s.a. México 1982.
(2) Ibid.
(3) Gunnar Mendoza Loza. Sucre y la organización de la República de Bolivia en 1.825. Correspondencia oficial inédita del Archivo Nacional de Bolivia. ANB. Editorial Judicial. 1998.
(4) Ibid.
(5) Antonio José de Sucre. Gran Mariscal de Ayacucho. Boletín de la Sociedad Geográfica y de Historia “Sucre”. Número Extraordinario. N° 479. Años 1994-1995. Tomo LXVIII. Departamentp de Gaceta, biblioteca y publicaciones de la Corte Suprema de Justicia. Editorial Judicial. Sucre 1995.
(6) Gunnar Mendoza Loza. Sucre y la organización de la República de Bolivia en 1825. Correspondencia oficial inédita del Archivo Nacional de Bolivia. ANB. Editorial Judicial. 1998.
(*) Es miembro de la Sociedad de Historia y Geografía de Oruro.
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