¿Cuál es tu orden de prioridades?

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“El dinero no trae la felicidad”. ¿A que te suena esa frase? es muy conocida en el mundo entero, y es verdad, pero no podemos quedarnos con ella y suponer que todo lo que tenga que ver con el dinero es malo, sino que es todo lo contrario; pero podemos pensar en esta otra frase “es la felicidad la que abre las puertas a las manifestaciones del dinero”.

La mayor parte de las personas primero quiere resolver sus problemas de dinero y se preocupa por las cosas materiales, entonces trabajan y trabajan, se esfuerzan mucho, pero se frustran, se enojan con su jefe, con sus compañeros y hasta con el mismo trabajo, no disfrutan de lo que hacen, porque además es seguro que eligieron su profesión porque “era rentable, prometedora”, pero no era lo que amaban hacer.

Todo ello enferma al alma y por ende también se enferma el cuerpo, es lo que los psicólogos llaman “estar somatizando las emociones”, es decir, que se transforman en enfermedades físicas, porque el cuerpo es el templo del alma, es donde ésta se aloja y si no se lo cuida el espíritu no puede estar en paz.

Por lo expuesto, es importante volver a ordenar las prioridades, lo que se acaba de describir es el resultado del desorden que existe al momento de priorizar lo importante para cada quien.

- En primer lugar, está el cuidado del alma, del espíritu, por lo tanto, se debe atender al interior de uno mismo, escucharse uno mismo y hacer lo que uno ama hacer, lo que disfruta, aquello por lo que puede perder el sueño y el hambre, aquello que le lleva horas, pero parecen minutos, lo que te hace levantar en las mañanas con ganas de seguir y no parar, con alegría, con energía. Además de cuidar el cuerpo con algún tipo de actividad que te mantenga en movimiento, como el ejercicio, una caminata, bailar, o lo que se te dé más fácil y te haga feliz, ya que si cuidas tu templo tu alma vivirá feliz y en plenitud.

- En segundo lugar, vienen los otros. Poner al servicio de los demás nuestros dones y talentos llena de felicidad. Además, date un tiempo para disfrutarlo en familia, para estar con los que amas, con los tuyos, pueden ser familiares o amigos. Pero no te quedes ahí, muestra tu talento, ayuda con él a mucha gente, pues no hay mejor sensación que el servicio a los demás, pero sin descuidarte a ti mismo.

- En tercer lugar, ambas acciones descritas arriba, te van a redituar una ganancia, por lo tanto, tus problemas materiales y de dinero también quedarán resueltos. Además, cuando haces lo que amas y lo pones al servicio de los demás lo haces contento y encima te pagan por hacerlo; si haces lo que amas nunca más vas a volver a trabajar, te divertirás y disfrutarás en grande y el premio será más que el dinero.

(*) Es Lic. en Comunicación y Periodismo, Dipl. en Coaching Femenino, Coaching Ontológico, Cert. en Bienestar Emocional, Liderazgo, Oratoria y Programación Neurolingüística. Cel.: 76141388