UN CIENTÍFICO DE LA METALURGIA TRISTEMENTE OLVIDADO

Confieso que deseo con intensidad, tener entre mis manos uno de los Libros científicos escritos en la tierra de Charcas (actualmente nuestra querida patria Bolivia), cuya primera publicación fue en 1640, hace 380 años, es decir hace más de tres siglos. El libro se titula “El Arte de los Metales”, cuyo autor es el religioso Fray Álvaro Alonso Barba, quien nació en España (Lepe - Andalucía, 1569?), vivió por mucho tiempo en Charcas (Chuquisaca, La Paz, Oruro y Potosí) y falleció también en España en el año de 1662, aunque su deseo era retornar a la tierra donde aprendió, se emocionó y apasionó por la minería y la metalurgia, quiso desentrañar los misterios de los minerales, metales y betunes, que cobija el seno de la tierra.

Sin embargo, existe copia en formato digital del “Arte de los Metales”, y con seguridad, pese a su presentación en castellano antiguo, su lectura emocionará a metalurgistas y no metalurgistas y a quienes vivimos apasionados con los minerales y metales, cuyas sorpresas son interesantes.

Es increíble, también describe la existencia de los “betunes”, ahora conocido como el petróleo, en la tierra de los Chiriguanos, sin embargo indica que a los españoles no les importaba siquiera conocer las propiedades de esta sustancia, pues estaban más interesados en el oro y la plata de la tierra de Charcas, cuando esta sustancia era utilizada por los nativos para usos domésticos y medicinales.

Leyendo a Fray Álvaro Alonso Barba, se tiene la sensación de estar en contacto con información actualizada sobre todo cuando el autor describe los minerales, metales, incluso las piedras en sus diferentes variedades y sus respectivas ubicaciones, pero inmediatamente se cae en la cuenta de que es un libro de hace 380 años atrás, pero no deja de sorprender.

Fray Álvaro Alonso Barba nos deja boquiabiertos cuando manifiesta que para conocer a los minerales debemos saberlos identificar por sus olores, colores y sabores, algo aparentemente risible, sin embargo con una profunda verdad, por ejemplo asocia el color del azogue con el color del planeta Mercurio, y ése es el nombre actual del azogue, sencillamente ilustrativo.

“El Arte de los Metales”, no sólo hace referencia a la descripción de los minerales y metales, sino también realiza un estudio técnico sobre los procedimientos metalúrgicos para los diferentes minerales, particularmente para la plata, que, en la época colonial era el mineral de excelencia en su explotación en el Cerro Rico de Potosí; como la calidad de la plata no era la misma que en los primeros años de su explotación, diseñó un método metalúrgico denominado “metalurgia de la plata por el método de cazo y cocimiento”, que fue replicada ampliamente en toda América y también en Europa, habiendo perdurado este método metalúrgico por ciento cincuenta años. El libro detalla los procedimientos técnicos de este proceso metalúrgico, por eso, sin duda se puede afirmar que este es un libro científico escrito en territorio charquino, actualmente Bolivia.

Barba, su nombre es desconocido en territorio boliviano, y aún más en Potosí, no existe una calle de importancia que lleve su nombre, ningún instituto técnico y universitario lo ha reivindicado con la fortaleza que debe ser. Aunque es de menester señalar que sí en España, país de su nacimiento, existen algunos Institutos Técnicos que llevan su nombre, existe el premio científico denominado “Álvaro Alonso Barba” de la Real Sociedad Española de Física y Química, pero en Bolivia, donde desarrolló su trabajo, no, aún cometemos la injusticia de tenerlo en el olvido.

Es hora de reivindicar al primer científico de nuestra tierra, que escribió un libro científico en Potosí para el mundo.

* Hugo Menchaca Alli, es abogado en el Consejo Minero de Gobernaciones – COMINGOB