Martes 23 de febrero de 2021
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Editorial y opiniones
Demora en llegada de vacunas causa angustias
23 feb 2021
Por: Armando Mariaca V.
Las vacunas para combatir al coronavirus aún tardarán mucho tiempo en cubrir lo que la población mundial necesita; entretanto, países con posibilidades financieras han logrado contar con cantidades superiores al millón de unidades que, por supuesto, no alcanzarán para toda su población; naciones del Tercer Mundo sólo recibieron algunos miles de vacunas; ni qué decir con el Cuarto Mundo que tardará mucho más. Lo extraño para la población es que algunos gobiernos han permitido que una parte sea destinada a miembros del régimen y allegados-una actitud que es reprochada porque se entiende que toda autoridad tiene que velar, en primera instancia, por la salud de su pueblo y no aprovechar su poder para auto-elegirse privilegiados de tener prioridad-.
Por principio, debió vacunarse a médicos, enfermeras y personal de servicio en hospitales y clínicas; se lo hizo en pocos casos y cubriendo muy poco de ellos; en segundo lugar, debió tenerse preferencia por ancianos que hayan pasado de los 75 años de edad y que están sanos y pueden recibir la vacuna sin peligro alguno; recién, luego de cubrir casos que se considere muy urgentes, disponer para vacunar al pueblo; pero, dada la exigua cantidad recibida, muy poco se podrá atender. Entretanto, las informaciones sobre adquisición de las vacunas y sobre su llegada a cada país, no se conoce y la población se siente angustiada y decepcionada sin saber a qué atenerse. Por otra parte, hay preocupación por el hecho de que “hay vacunas para comprar” y surge la pregunta: ¿Quién provee a las farmacias y vendedores clandestinos? Si las fábricas no han atendido sólo lo requerido por cada país, querrá decir que lo vendido por contrabando salió de los mínimos dispuestos y, casi con seguridad, de cupos destinados a quienes han adquirido cantidades mayores. Estos son casos dignos de investigación para sancionar a quienes resultaren culpables del hecho contrario a la población y ajenos a la moral solidaria.
