Veracidad de las encuestas

La empresa encuestadora Ciesmori, que antes gozaba del beneplácito del partido en función de Gobierno, porque los resultados le daban por ganador, ahora está en entredicho frente a éste porque en la actualidad muestra preferencia para los partidos opositores en cuatro plazas consideradas importantes para el Movimiento Al Socialismo, en las intenciones de voto.

Por supuesto, los militantes, quienes fungen como autoridades y su máximo representante salieron al paso para criticar las encuestas y señalar que éstas no muestran la realidad, la cual se ve sólo en la votación y se verá en el recuento de votos.

Asimismo, señalaron por separado que esos estudios no deberían hacerse cuando la fecha de las elecciones se acerca porque inducen al voto de los indecisos, sin embargo, no reclamaron aquello cuando las encuestas les favorecían.

Sin embargo, no sólo los militantes del MAS dudan de la veracidad de las encuestas, sólo que ahora estos señalaron que seguramente se hizo la consulta sólo a funcionarios públicos pertenecientes a los partidos políticos favorecidos con la intención de voto en los diferentes municipios.

Lo cierto es que no se sabe cuál es la muestra y a quiénes se encuesta, muchos ciudadanos comentan en las redes sociales que a ellos nadie les preguntó nada. Pero el modo de trabajar de esas empresas es contratando personas para que realicen los sondeos con parámetros como las edades, condición social, etnia, barrio en el que viven, hasta el tipo de vivienda de los encuestados para lograr cubrir una muestra representativa de la población, y que sea lo más objetiva y exacta posible.

Otro dato significativo es que siempre que un partido político o agrupación ciudadana que no se ve favorecida en las encuestas dudan de la veracidad de éstas, pero defienden las tendencias cuando muestran resultados esperanzadores para sus candidatos.

Los componentes del partido azul creen que la encuesta, que precede a las elecciones subnacionales de marzo próximo, se hizo consultando solamente a los empleados públicos que tienen que cuidar su empleo y no así a la población en general.

Pero tomemos en cuenta que los únicos que públicamente pasaron factura por haber entregado pegas fueron autoridades del actual Gobierno central, que condicionaron la entrega de vacunas, de obras y hasta amenazaron a los funcionarios públicos que no hagan campaña por el proceso de cambio. Entre los opositores inclusive muchos candidatos crearon recientemente sus partidos o agrupaciones ciudadanas, luego de haber ejercido otros cargos o profesiones, ¿tendrán los recursos para pagar a las encuestadoras para que se les favorezca?