EL PAPEL DE LOS PADRES EN LA EDUCACIÓN INICIAL DE SUS HIJOS

Esta etapa de vida para los niños es de transición donde mantienen latente y de manera natural la expectativa por nuevas experiencias, va a depender de los ambientes de crianza favorable o desfavorable que marquen profundas huellas en sus vidas pues los padres de familia inician las primeras enseñanzas de acuerdo a su cultura, formación y necesidades.

El interés por criar y educar a los niños es muy antiguo, pero la idea de cómo hacerlo y las prácticas para la crianza han ido cambiando al pasar los años. Es oportuno referirnos a la concepción de lo que llamamos infancia. La ingenuidad, la fragilidad y la necesidad de protección, de entendimiento y de amor, son características propias e inherentes a la niñez que empezaron a ser desarrolladas a partir la intuición maternal lo que llevó a marcar una diferencia en la vida de los niños y, a su vez, un cambio en la forma de educar.

En esta edad la familia se constituye en un pilar fundamental para la educación de sus hijos que se desarrollan como elemento integrado de una familia y comunidad, adquiriendo experiencias desde su participación activa y es ahí donde aprehenderá normas, actitudes valores y principios que orientaran el desarrollo socio afectivo en una interrelación mutua, cuando el niño se entiende como parte de un conjunto inmediato que es la familia en la cual tiene derechos y deberes, cuando comprenda que su familia es parte de la comunidad estará en condiciones de incorporarse a realidades sociales. Entonces la familia, la comunidad y la escuela debe estimular con ejemplos una serie de habilidades sociales que permita un desarrollo afectivo y emocional adecuado de los niños, pues se trata de otro elemento clave de su desarrollo y de su aprendizaje y en la toma de decisiones, esto va relacionado con la adquisición de seguridad y confianza en sí mismo que conlleva una gran capacidad de autocontrol y autoestima lo que le llevará a potenciar el resto de sus capacidades.