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Viernes 15 de enero de 2021

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Editorial y opiniones

EDITORIAL

Lo que no convenció a los choferes

15 ene 2021

El coronavirus afectó a muchos sectores productivos y el de los choferes no fue la excepción, sin embargo, no todos decidieron adoptar medidas de presión y mucho menos recurrir al bloqueo de caminos, porque esa medida está tipificada en el Código Penal como un delito, por lo que se espera que por el bien de la población se llegue a un acuerdo satisfactorio para todos

Recién se llegó a un acuerdo entre el Gobierno y los choferes, después de verificarse un paro de 24 horas el martes 12 de este mes. El convenio firmado puso fin a toda medida de protesta y los que bloquearon las carreteras en demanda del diferimiento de seis meses en lugar de cuatro para sus deudas con los bancos, decidieron levantar las medidas de presión.

Ese feliz acuerdo no logró convencer a todos los sectores del autotransporte porque, según dijeron, en el documento que firmaron no se habla de diferimiento sino de período de gracia, que aunque parece ser lo mismo no lo es.

El diferimiento de una deuda es un beneficio para no realizar el pago de una cuota en la fecha programada y trasladar el pago a una nueva fecha sin cargos de mora o deterioro del récord crediticio.

En cambio el período de gracia es un plazo otorgado por la entidad, en el que el cliente no debe hacer ningún abono a la deuda por el tiempo que se determine, es decir, si usted es el beneficiado, por esos meses no se tendrá que preocupar por pagar la cuota del crédito. Durante ese periodo de gracia sí se capitaliza el cobro del interés corriente, por tanto cuando el plazo acabe, y deba volver a cancelar las mensualidades del préstamo, ese aumento se verá reflejado en las cuotas y serán mayores a las originalmente estipuladas.

La diferencia es clara, en el periodo de gracia, si bien el deudor no debe preocuparse por pagar las cuotas, en cuanto termina ese lapso se debe pagar más de los intereses, en cambio cuando se trata de un diferimiento se habla de trasladar la fecha del pago de la deuda, pero la cuota no sube ni lo hace el interés.

Obviamente, a nadie le conviene pagar más aunque se deje de hacerlo por un tiempo, y es por eso que los choferes se sienten molestos y una parte de ese sector quiere retomar los bloqueos, pero esta vez se tomarían 48 horas de protesta. Sin embargo, para el Gobierno ya es asunto cerrado y las protestas continuarán, pero a quienes perjudican los bloqueos no es a las autoridades sino a las personas de a pie, al ciudadano que tiene obligaciones que cumplir y muchas veces tienen que trasladarse de un lugar a otro, pero se ven impedidos de hacerlo o tardan más en llegar a su destino debido a las barricadas que impiden la libre circulación en las carreteras.

Es más, en algunos lugares, como en Potosí y Santa Cruz, se vio que los choferes reaccionaron de manera agresiva cuando desinflaron y pincharon llantas de los vehículos que intentaban pasar por las barricadas o en su caso esquivarlas, por lo que también es un gran perjuicio para esas personas que intentan hacer su vida normal en medio de las protestas de un sector.

También existe preocupación en el sector bancario porque se considera que el nuevo diferimiento de créditos (por seis meses de gracia) pone en riesgo la estabilidad financiera, ya que estos meses de adición se suman a los 10 meses establecidos el año pasado, pero el Gobierno considera que no se está atentando a dicha estabilidad en las finanzas de los bancos.

El coronavirus afectó a muchos sectores productivos y el de los choferes no fue la excepción, sin embargo, no todos decidieron adoptar medidas de presión y mucho menos recurrir al bloqueo de caminos, porque esa medida está tipificada en el Código Penal como un delito, por lo que se espera que por el bien de la población se llegue a un acuerdo satisfactorio para todos.

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