Trabajadoras sexuales vuelven a las calles “implorando” apertura de locales

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Por segunda ocasión en menos de una semana, trabajadoras sexuales y operadores de locales nocturnos dedicados a casas de lenocinio, protagonizaron una protesta ruidosa en puertas de la alcaldía exigiendo la reapertura de estos locales, muchas de ellas afirman que ya no tienen nada que comer, y que por ello están obligadas a cumplir su trabajo de forma clandestina o en las calles.

Un grupo de mujeres y varones dedicados a estas actividades se apostaron en cercanías a la puerta del edificio municipal, para reclamar a voz en cuello la posibilidad de que se puedan reabrir los locales de lenocinio y cumplir con sus actividades de meretrices, algo que hasta el momento no fue atendido por el Gobierno Autónomo Municipal de Oruro, bajo el argumento que aún están restringidas algunas actividades que involucran el tema del consumo de bebidas alcohólicas.

Señaló que hasta el momento al alcalde no les brindó audiencia para hablar de este sector que por más de ocho meses no cumple sus labores con normalidad, y que esto afecta a mujeres que por diversas circunstancias de la vida se dedican a esta labor y tiene una familia por detrás que mantener.

Señaló que esta actitud negativa de las autoridades ediles fomenta la proliferación de locales clandestinos donde, sin ningún tipo de medidas de bioseguridad, la féminas son expuestas a cumplir sus labores con los riesgos que esto implica, además que estos ambientes no cancelan ningún tipo de impuestos y no cumplen las normativas.

En el caso del consumo de las bebidas alcohólicas, el entrevistado señaló que se conoce que de momento no se puede cumplir con esta actividad, pero que el reclamo pasa principalmente porque se aperturen los lenocinios para que las mujeres que se dedican al trabajo sexual lo hagan en condiciones adecuadas y preservando su salud y la de sus clientes.

El alcalde Saúl Aguilar al ser consultado sobre la protesta, señaló que evidentemente es un tema aún no resuelto por el municipio y que se debe buscar algún mecanismo porque estas mujeres también tienen el derecho al trabajo, pero que el problema pasa principalmente por el consumo de bebidas alcohólicas ya que cuando se abren estos locales, muchos de los administradores incumplen las restricciones y realizan la venta de bebidas espirituosas de forma clandestina.

Fuente: LA PATRIA