Mantener los suelos con vida

Al mirar al suelo, lleno de tierra y piedras, que son objetos inanimados, podemos pensar que se trata de algo inerte, sin vida, sin embargo, éste sí vive, a través de los animales o insectos que alberga, las plantas y otros seres vivos del reino vegetal.

El suelo es un ecosistema donde habitan desde pequeños microorganismos hasta grandes seres vivos, que por el hecho de ser inanimados no quiere decir que están muertos, pues un árbol, una planta, una flor, están ahí, sólo existen, pero tienen vida y muchos de esos seres son los responsables de mantener el aire limpio de alimentar a insectos y animales, inclusive algunos hasta a los seres humanos.

Los suelos también albergan a otros seres vivos, como las lombrices, que a la vez oxigenan los mismos y permiten que árboles y plantas echen raíces y crezcan, mientras se alimentan de sus minerales y de los nutrientes que las hierbas no necesitan.

Y no sólo eso, sino que los suelos también pueden ser hogar de muchos animales, que excavan para preparar sus madrigueras, que los mantendrán a buen resguardo de los predadores que acechan afuera, como los topos, conejos y muchos otros animales.

La erosión, la explotación, los deslaves, los deslizamientos son elementos que afectan de manera negativa a los suelos que también pueden servir para cultivo, pero debemos pensar en una forma sostenible de utilizarlos, porque su uso desmedido y su sobreexplotación puede ocasionar que los mismos se conviertan en espacios inertes, que no sirvan para nada, ni para cultivo, ni para dar vida a otros seres, por lo que debemos tratar de cuidar también esta parte de los ecosistemas.

En cuanto a la naturaleza se cumple el postulado que señala que todo lo que le haces a otros, te de lo haces a ti mismo, pues el daño que se le hace al medioambiente nos lo estamos haciendo a nosotros mismos, ya que somos parte del ecosistema que queda en desequilibrio cuando existe una falla, aunque sea pequeña, en el equilibrio que natura intenta mantener frente al desenfrenado consumismo de los humanos que tiende a acabar con todo lo que se mueve.

La Organización de las Naciones Unidas, ONU, instauró el 5 de diciembre como el Día Mundial de los Suelos para enviar el mensaje del cuidado de éstos, destacando su importancia para el equilibrio del ecosistema y para la vida saludable en el planeta Tierra, además que, de no actuar pronto contra la pérdida de la biodiversidad del suelo, la seguridad alimentaria en el mundo se vería amenazada.

Este año, precisamente, la ONU lanzó la campaña denominada “mantengamos vivo el suelo, protejamos la biodiversidad del suelo”, para concienciar a las personas sobre la importancia de proteger la biodiversidad de este elemento que, aunque parezca sólo algo inerte e inanimado, como lo vimos líneas arriba, es de suma importancia para la vida del planeta y sus habitantes, sean éstos humanos, animales o vegetales.