6 años de la declaratoria de patrimonio departamental a la danza de los tobas

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Este 28 de octubre se recuerdan 6 años de la promulgación de la declaratoria departamental de “Patrimonio Cultural Histórico del Majestuoso Carnaval de Oruro” a la danza de los tobas como un mecanismo para preservar la esencia de la danza y transmitirlas a las futuras generaciones para evitar apropiaciones indebidas.

Juan Manuel Cuellar Carpio, gestor cultural y promotor de esta normativa legal promulgada en la gestión del entonces gobernador Santos Tito a través de la Ley Departamental 077/2014, conversó con LA PATRIA sobre los motivos que originaron propiciar a esta danza como “Patrimonio Cultural Histórico del Majestuoso Carnaval de Oruro”.

Señaló que entre las danzas primigenias del carnaval orureño se expone la danza de los Tobas que ostenta una riqueza cultural histórica desde tiempos ancestrales relacionada con el pueblo milenario de los Urus y actualmente se ha consolidado como parte elemental del folklore del Estado Plurinacional de Bolivia.

Explicó que los sacerdotes a través de una representación teatral, exponían al pueblo que en las tierras bajas del chaco, oriente y la amazonía boliviana habitaban pueblos salvajes genéricamente llamados “ch’unchos” que se convierten al cristianismo, pero también se advierte la existencia de pueblos bárbaros e indomables como los chiriguanos que no eran sometidos a la catequización.

“A inicios del siglo XX se institucionalizan las primeras comparsas folklóricas a merced de los pasantes o “prestes”, así tenemos la comparsa de los Diablos en 1904, comparsa de los Incas en 1906, comparsa de los Morenos en 1913, comparsa de los Tobas en 1917, los Llameros en 1921 entre otras danzas, para continuar ofreciendo danza y dirigirse rumbo a la Capilla de la Virgen del Socavón, Patrona de los Mineros”, manifestó.

Por filas de la danza de los tobas pasaron danzarines, pasantes y directivos que en su momento aportaron e impulsaron al engrandecimiento de este género de danza institucionalizada por primera vez por Tomás y Donato Cáceres para el carnaval de Oruro, elemental preponderar la colaboración en sus comienzos por personas dedicadas a la minería y posteriormente el gremio de los “carreritos”.

Agregó que la danza transmite mensajes de respeto y preservación de la biodiversidad, preservar la identidad de los pueblos indígenas originarios que son representados figurativamente a través de esta expresión folklórica, parte del diverso mosaico socio-cultural que da identidad y pluralidad en Bolivia, además es pertinente transmitir a las futuras generaciones el legado cultural ancestral e histórico respaldados en fuentes bibliográficas, para evitar apropiaciones indebidas y/o malas interpretaciones.

Fuente: LA PATRIA